¿Juegan igual los niños y las niñas?

Por Mamareciente
Creo que en la forma de jugar y en las preferencias por uno u otro tipo de juguetes hay algo innato, algo genético que hace que niños y niñas tengan gustos diferentes, y que no se trata sólo de que les enseñemos o no lo mismo.
Hasta ahora el Chiquinini no ha tenido muchas cosas, pero pienso que valen igual para niños o niñas: el lego, los peluches, un tambor o una pelota por ejemplo. Sí tiene un coche teledirigido que imagino a una niña es posible que no le hibiéramos comprado. Y curiosamente no le gusta. No tiene gracia para él, pues una vez que sabe que tal botón lo mueve hacia deltante y tal otro hacia atrás, fin del interés. Y es que se entretienen con las cosas más simples.
Pero es cierto que le gusta “aporrear” cosas, le gustan los coches, camiones, trenes y aviones. Y no tiene el más mínimo interés por los muñecos o peluches.
El otro día estuve en el jardín de infancia del colegio en el que queremos matricular al Chuiquinini cuando toque, viendo las instalaciones, a las profesoras, etc. Entré en el aula cuando estaban allí los niños y me resultó curioso ver a todas las niñas, bastante tranquilitas, sentadas entorno a una mesa, viendo cuentos y similares; y a los niños haciendo el burro con los triciclos y balancines.
-Las niñas son más tranquilas que los niños, no?-dije. Y la profe me contestó que al menos sí tienen formas diferentes de jugar.
Esta pequeña reflexión viene a raíz del último juguete que le hemos comprado al Chiquinini, un puzzle. Tenía ya uno, de animales, y parecía gustarle bastante pero ya lo tenía controlado. Así que fuimos a por otro del mismo estilo, pero un poquito más difícil. El único que cumplía los dos reuisitos mencionados parecía pensado sólo para niñas. La caja y demás en tonos rosas y llamado “Señorita coqueta”. Pero vaya tontería, en realidad se podían aprender las partes del cuerpo con él, las prendas de vesir, etc. Pero no, no había uno similar en que hubiese figuras y piezas de niños y niñas.
Dudamos por un momento si comprarlo, era tan rosita…Y entonces pensé que vaya chorrada lo del azul y el rosa y mil cosas como esa. Asi que el puzzle “de las niñas”, como dice Chiquinini porque se ha percatado de que todas las figuras son niñas, está en casa. Y le gusta, y se entretiene con él poniendo brazos, piernas, botas y zapatos.