Editorial: Titania
ISBN: 978-84-92916-20-7
Fecha lanzamiento: marzo 2012
Género: Novela histórica
Serie: 1º Highland Heroes
Cuando el duque de Sudeleigh descubre, para su horror y sorpresa, que su hija Elizabeth es la autora de varios artículos feministas (que en esa época son considerados "subversivos"), decide enviarla, junto a su hermana Isabella, a una boda obligada con lord Purfoyle. Pero Elizabeth, antes que casarse con un noble, prefiere hacerlo con cualquier otro, incluso con Douglas McKinnon, un rudo escocés que rescata a ambas hermanas de un accidente en el camino. Lo que Elizabeth no sabe es que ese pobre campesino es en realidad un importante aristócrata, heredero de una de las fortunas más cuantiosas de la comarca, y su padre el duque está más que contento con el nuevo pretendiente de su hija. Ahora es la propia Elizabeth, víctima de su propia trampa, la que decide iniciar una cadena de engaños que la conducirán inevitablemente a la ruptura con la persona que su corazón ha elegido, al menos que el amor pueda salvarlos.Puede contener spoilers
Es dificil definir "Juego de apariencias". Como en casi toda novela histórica, nos encontramos con una dama de buena cuna que ha crecido entre algodones, demasiados si se tiene en cuenta su parentesco tan próximo a la casa real. De este modo, exponerse a un matrimonio de conveniencia debería ser una hecho esperado para una joven como ella, sin embargo, Elizabeth es muy distinta al resto de féminas. Con su carácter indomable e independiente, además de desafiar las ideas conservadoras de su padre escribiendo artículos feministas (leáse su carta a favor de la igualdad entre hombres y mujeres), no vacila en volver a hacer de las suyas creando una situación comprometida con nada más y nada menos que...¡con un highlander granjero!
Pero su desliz
Mi primer contacto con la autora no ha podido resultar más satisfactorio. A partir de una historia sencilla pero no exenta de carácter propio, nos encontramos con una trama que me ha resultado todo un soplo de aire fresco. La mezcla de ingredientes es explosiva: una dama inglesa, un highlander que se hace pasar por un simple granjero y un matrimonio no deseado. La diversión está asegurada.
Douglas es un atractivo escocés (con kilt incluida) que regresa a su casa después de pasar una temporada en Londres intentando recuperar unas tierras confiscadas pertenecientes a su familia. Su carácter serio, noble y desinteresado le lleva a ayudar a un par de jóvenes que se encuentran atascadas en medio de su camino. Pero no sabe que la ayuda tendrá un precio más caro del que pensaba...
Sí ya de por si el conjunto me ha encantado, la familia Drayton me ha resultado de lo más pintoresca. No me cabe duda de que el matrimonio y sus cinco hijas tendrán un papel fundamental en esta serie, pero especialmente debo destacar el papel del cabeza de familia, Alaic, el duque de Sudeleigh, quien resulta ser todo un descubrimiento. Su actitud de hombre todo poderoso ligado a las normas sociales contraresta con la sensibilidad y bondad que desprende como figura paterna.
Por otra parte, es una novela que, ambientada en la rebelión de los jacobitas, cuenta con un buen trasfondo histórico documentado. Aun así, la historia se entremezcla con la ficción de forma acertada, sin resultar pesada con detalles innecesarios y, por supuesto, sin eclipsar la trama principal.
Como punto negativo, tan solo puedo señalar que el final me ha resultado un poco precipitado y, en ese sentido, podría haber desarrollado un poco más la historia. No obstante, la novela no me ha defraudado.
No quiero decirlo demasiado alto, pero parece que al final tendré que reconciliarme con el género histórico dado que las últimas lecturas que han llegado a mis manos no han dejado de sorprenderme (hay varias reseñas pendientes). De lo que sí estoy segura es que espero con ansías la publicación del siguiente libro de la serie, "El aventurero", el cual seguramente verá la luz en septiembre de 2012. Ya queda menos para disfrutar de la historia de Isabella.
Valoración: 4,5/5