Se trata de emparejar palabras. Cada vez que oigas los distintos emparejamientos será una prueba distinta, puesto que la lectura debe hacerse alternando el orden de la lista.
Tu ayudante leerá la lista. Una vez terminada la lectura, leerá una de las palabras (o la primera o la segunda de cada pareja) y tú escribirás la palabra que la empareja según la lista.
Por ejemplo, dada la lista siguiente:
LÁPIZ-PAPEL
ÁRBOL-PÁJARO
HUEVO-MÁQUINA
MANZANA-ROJO
MONO-PLÁTANO
El lector dirá:
ÁRBOL y tú deberás escribir: PÁJARO
Después HUEVO y tú escribirás MÁQUINA
Después ROJO y tú escribirás MANZANA
así hasta terminar la lista.
Como puedes observar, tras la primera lectura, se realiza la prueba cambiando el orden de presentación de las palabras.
Si deseas volver a hacer la prueba, vuelves a cambiar el orden al leer y al escribir, de este modo se ejercita la memoria.
Al igual que en otras pruebas, el ejercicio puede realizarse inmediatamente después de escucharlo (memoria inmediata) o esperando cinco minutos (memoria demorada).
A partir de aquí puedes imaginar otros ejercicios similares a estos con el fin de desarrollar la memoria.
Por ejemplo: Tratando de recordar cifras de números en vez de textos o palabras. Emparejando personas con algún parentesco. Emparejamiento de números.
Puedes llevar un control de tu capacidad y progreso, anotando en cada ensayo el número de palabras (o números o asociaciones) y construir una gráfica en la que puedas observar cómo mejora tu memoria desde que iniciaste los ejercicios.
Te aseguro que quedarás asombrado de cómo al ejercitar tu memoria vas consiguiendo cada vez niveles más altos de capacidad memorística.
No te olvides de contárnoslo, quizás podamos hacer un campeonato con nuestros seguidores y exponer los resultados como demostración del progreso obtenido.