Juguetes caseros y ecológicos: Pintura de dedos no tóxica

Por Amormaternal

Como hemos comentado en otras ocasiones, nos parece importantísimo fomentar la creatividad en los niños. Una manera genial de hacerlo es dando rienda suelta a su vena artística a través de la pintura.
Los niños tanto grandes como pequeños suelen disfrutar mucho de pintar con las manos, y con los pies también, la textura de las pinturas es bastante agradable y permite hacer cuadros muy divertidos. La experiencia sensorial de tocar las pinturas con los dedos, de espacirlas sobre el papel con su textura cremosa es verdaderamente deliciosa y relajante. Un requisito indispensable cuando queremos pintar con los más pequeñitos es conocer los ingredientes de la pintura y asegurarnos de que ninguno de ellos sea tóxico.
Una manera sencilla de saber qué contienen las pinturas, y por ende de estar tranquilos, es de prepararlas nosotros mismos en casa. Es muy fácil hacerlo y nos servirá para aquellas tardes de lluvia interminables en que estemos aburridos en casa.
Ingredientes:
  • 2 tazas de harina de trigo
  • 2 1/2 tazas de agua fría
  • 2 tazas de agua hirviendo
  • 2 cucharadas de sal
  • Colorante alimenticio
  • Tarros herméticos pequeños para guardar cada color por separado

Procedimiento:
  • Mezcla los ingredientes secos.
  • Añade el agua fría revolviendo constantemente hasta obtener una textura homogénea.
  • Vierte las 2 tazas de agua hirviendo en una cacerola y añade poco a poco la mezcla fría.
  • Revuelve constantemente la mezcla con un batidor de mano, hasta llegar al punto de ebullición para garantizar una textura cremosa y homogénea.
  • En caso de que la mezcla tenga grumos, podemos licuarla por un par de minutos y luego colarla.
  • Separa la mezcla en envases individuales y añade colorante alimenticio a cada porción hasta obtener el color deseado.
  • Conserva los tarros cerrados herméticamente luego de cada uso.
Otra idea linda que podemos hacer es estampar la huella de la mano de mamá y bebé en un papel, en distintos colores. Años después será muy tierno mirarla, hacer una nueva y comparar cuánto ha crecido la mano de nuestros hijos :) Nosotros lo hemos hecho con las manos y con los pies y desde luego a Sam le encantó tanto la idea que cada vez que pintamos (ahora con pinceles también), ¡me pide pincelarle los pies!
¿Y tú? ¿Pintas con tus hijos? ¿Te animas a preparar estas pinturas y colgarnos una foto en nuestro muro?
Foto © Emely/cultura/Corbis