2. En casa somos muy fans del patinete Micro, tanto que hasta lo uso yo, aún a riesgo de romperlo. Se ha convertido en una extensión de mi hijo. Me gusta su estabilidad, facilidad de manejo y la velocidad que coge, rueda mejor que otros que hemos probado. Además, es evolutivo y si le adaptas la pieza necesaria (el asiento y el manillar en forma de ‘o’), dura mucho mucho tiempo.
3. El barco pirata es uno de esos juguetes de lujo que les chiflan a los niños. Éste me ha encantado y creo que va directo a la carta para el Olentzero. Es de madera, no le falta detalle y sus piratas de madera son muy graciosos. Que conste que el camión de bomberos no le va a la zaga.
4. Juego simbólico: una casita de muñecas es uno de esos juguetes que se suele regalar a niñas, pero que les divierte a todos. ¿Por qué no aprovecharlo? La casita de muñecas de madera de Lidl es económica y se puede completar con muchas piezas aparte. En este post explican cómo son los juguetes de esta cadena de distribución.
5. Un tren de madera es perfecto para esta edad: desarrolla la motricidad a la hora de montar y desmontar los raíles y la imaginación a la hora de discurrir el recorrido. Los Reyes van a dejarnos por casa el de Lidl, muy económico, y que también engancha con el tren de madera de Ikea. Éste otro de Babycaprichos tiene más piezas.
6. Esta bicicleta sin pedales me encanta. No es el mismo modelo que tenemos en casa, la nuestra es un poco más grande y de plástico. Pero de ésta me han enamorado sus ruedas y que, aunque parezca de madera, no pesa. Con este tipo de bicis aprenden a mantener el equilibrio y son la mejor opción antes de pasar a los pedales.
7. El caballete de Ikea no lo tenemos, pero por falta de espacio. A los peques les chifla pintar en pizarra con tiza y rotulador, y este caballete lo tiene todo. Para descubrir a pequeños artistas.