Julián Maeso: "Las etiquetas musicales son tonterías derivadas de la falta de cultura de este país"

Por David Gallardo @mercadeopop
'Somewhere somehow' es el tercer disco de Julián Maeso, el primero como artista de Sony Music bajo el sello Legacy y un nuevo paso en una carrera que, según él mismo plantea a Mercadeo Pop, es de "largo recorrido" y en la que "todavía" le queda "mucho por hacer y por aprender".
Los cimientos de la música del ex The Sunday Drivers siguen asentados sobre el soul y el rock de los años setenta, pero el abanico de sus fuentes se expande alfunk, al blues, el country e inclusoo el jazz y el reggae. Eso es lo que sonará este viernes 25 de noviembre en su presentación en el Teatro de Madrid.
Su paleta de colores es tan amplia como la música que Julián (Toledo, 1976) ha escuchado durante toda su vida, lo que le lleva a sentenciar que "las etiquetas musicales son tonterías derivadas de la falta de cultura en este país", que provoca que cada uno vaya por su lado.
"Los rockeros por un lado, los heavies por otro, los poperos por otro. Eso es falta de cultura y es desgraciadamente un mal para todos porque todo se sectariza", para plantear después que más allá de etiquetas, "hay músicos con mucho nivel en España a los que hay que escuchar un poco más".
Así, valora el auge de bandas de soul de un tiempo a esta parte como Anaut, Aurora & The Betrayers y Freedonia, a la vez que recuerda de que ese movimiento es fruto de "diez y quince años de trabajo previo" y avisa de que "está ya decayendo" su tirón mediático.
"Es que estamos haciendo ahora música que se hacía en los sesenta. Es como el folk y el country, que también nos han llegado ahora", destaca, y añade que "es preocupante que no hay chavales jóvenes en los conciertos de este tipo de música rock, soul y blues".
"A la gente joven solo se les ha sacado del centro de la ciudad para que hagan botellón sin molestar... si les privas de ir a los conciertos y no hay una educación musical en los colegios, qué puedes esperar. La educación musical es como en el resto, se ha limitado a memorizar", reflexiona, y añade: "La música tiene que estar desde pequeños en los colegios".

Tras admitir que, de hecho, él "suspendía música porque todo era memorizar obras" de compositores clásicos, prosigue Julián denunciando el abandono de la educación musical en los colegios, que ha llevado directamente a prescindir de ella tras mantenerla "totalmente obsoleta".
En cualquier caso, a pesar de las dificultades comunes en la profesión a la hora de levantar una carrera, apunta que lo que le "motiva" y la da "fuerza" es hablar con alguien "después de un concierto y te dice que lleva un mes de mierda pero que le has recargado las pilas y le has generado ilusión".
"Se convierte incluso en una labor terapéutica, es lo más bonito hacer eso en alguien", afirma para agregar acto seguido que "el dinero va y viene y, salvo casos contados, de todos los miles de músicos que hay en España, a fin de mes llegan cuatro y el resto están en la pelea permanente".
Y denuncia: "La mayoría de los músicos no facturan, están sin derechos y desprotegidos, apenas cotizan. Los músicos en España se van a morir en la cuneta porque no han cotizado. Estaría bien poder pagar algo progresivo en función de lo que ganas. Ese es el caso del 95 por ciento de los músicos, porque hay una serie de intermediarios que se lo quedan todo. Es un problema global pero todo el mundo traga".

Tal y como hace con sus canciones, no duda Julián al compartir su visión de un mundo en el que "lo último son los valores y la música, se trata de vender a tu madre por dos duros, esa es la condición del ser humano hoy en día".
"A los gobiernos y todos los sistemas que manejan el cotarro les interesa un pueblo que no tenga cultura, que se puedan divertir un poquito el fin de semana, con un poquito de dinero para ahogar sus penas en alcohol... pero no les interesa un pueblo que tenga cultura general", explica.
Todo esto está plasmado en 'Somewhere somehow', un disco con sonido orgánico y clásico con producción de Alfonso Ferrer y colaboraciones a las voces de Alana Sinkey y Erin Corine, así como Jorge Pardo a la flauta, Lyndon Parish como letrista, Albert Sant al piano, Ovidi de Los Zigarros, Adrián Costa de The Criers, Luis Gálvez y Sergi Fecé.
'Somewhere somehow' toma el relevo de 'One way ticket to Saturn', el disco de 2014 que relanzó la carrera de Julián Maeso y al que siguió una gira de 160 conciertos por todo el país. Siempre en la carretera, como está ya de nuevo en 2016, el músico recala este viernes 25 de noviembre en el Teatro Barceló de Madrid. Eso por ahora.

ENTREVISTA PUBLICADA ORIGINALMENTE POR David Gallardo EN EUROPA PRESS.