El ejemplar de las fotos se hizo unas cuantas pasadas sobre mi para curiosear, estos gavilanes suelen tener esa costumbre, incluso lo hacen adultos, en especial si uno anda por lugares poco frecuentes para un humano como permanecer dentro de una laguna o medio escondido entre los pastos altos.
El día estaba algo nublado y solo de a ratos se filtraba la luz del sol que había salido media hora antes, por lo que la iluminación no fue algo débil, aunque algunas creo que son rescatables. Estas son las fotos que más me gustaron.
El ejemplar de las fotos es fase oscura, agradezco a Guillermo Rost la observación.