Karin Boye, Gallo Nero. Premio Nacional del Ministerio de Cultura español a la mejor traducción de: Carmen Montes Cano.
El protagonista, Leo Kall, trabajador del Estado Universal, inventa una sustancia que una vez inyectada obliga al paciente a decir la verdad.
A partir de aquí todo el discurso de Karin Boye se centra en el dilema ético que plantea la pérdida total de la privacidad del individuo.
Escrita después de haber visitado la Alemania de Hitler y sobre todo la Rusia comunista, Kallocaína es una advertencia sobre los peligros de una sociedad totalizante y controladora. El secreto se transforma entonces en el último reducto de libertad en una sociedad que todo lo ve y todo lo manipula.
Karin Boye, con una prosa poética y nostálgica crea una obra en la que se percibe su tristeza por una Europa que se desmorona y que se entrega en cuerpo y alma a la construcción de una sociedad que todo lo prohíbe.
Kallocaína también es una historia de amor en tiempos de guerra, en un mundo donde el amor no es una prioridad sino simplemente necesitad de perpetuar la especie y dar a luz a nuevos jóvenes guerreros. Aun así Leo y Linda, su mujer, logran sentir amor el uno por el otro, un sentimiento prohibido que no deberían de sentir pero que sienten a pesar de todo.
Kallocaína es una pieza imprescindible en la literatura distópica que viene a llenar en lengua española el vacío que existía entre Un mundo feliz, 1984 y Fahrenheit 451, completando así el mapa literario de un género.
La autora se suicidará en 1941, el día en que Hitler invade Grecia.
Donatella IannuzziLibélula Libros