Aunque me han gustado muchos discos publicados en 2015, tengo que confesar que el álbum del año para mí ha sido Aerial de Kate Bush (2005). De hecho, no me consideraba fan de esta mujer hasta haber quedado fascinado recientemente por este doble álbum. Antes de Aerial había escuchado Hounds Of Love, pero la cara B me parecía demasiado experimental. También me enganché por una temporada a 50 Words For Snow, pero Aerial ha sido para mí un punto y aparte a partir del cual reconocer el talento musical de Kate Bush.Empecé escuchando el álbum con bastantes reticencias, ya que abordar un disco tan extenso no es tarea fácil. Sobre todo teniendo en cuenta que hablamos de dieciseis temas rondando la mayoría de ellos los cinco minutos de duración. También la fecha en la que salió publicado me tiraba mucho para atrás. Siempre he situado por un simple prejuicio la época gloriosa de Kate Bush en los ochenta, por lo que un álbum publicado en 2005 no me daba demasiada confianza. Crepuscular, demasiado maduro, aburrido... eran las palabras que se me venían a la cabeza antes incluso de haberlo escuchado. La canción que abre el álbum, King of The Mountain, empezó por barrer de un soplido todos esos prejuicios. A pesar de su excesiva duración, el álbum empezó a engancharme poco a poco y, como la obra maestra que es, lo hizo a partir de temas como π, A Coral Room, How To Be Invisible o Sunset. A partir de esos puntos de anclaje, el resto de canciones Aerial cayeron por su propio peso.Hablamos de un álbum especial dentro de la discografía de Kate Bush, ya que supone una nueva etapa en su carrera musical. Se podría decir que desde su primer álbum The Kick Inside (1978) hasta The Red Shoes (1993) Kate Bush había publicado álbum tras álbum con la periodicidad de un músico más o menos convencional. Sin embargo, a partir de 1993 decide aislarse del mundo y formar una familia a la que se dedicará a tiempo completo. Aerial se hará esperar la friolera de doce años, un tiempo que supondría con total seguridad la muerte comercial para cualquier músico convencional. Sin embargo, la prensa especializada ya se hacía eco de la salida del álbum años antes de que saliera al mercado, hambrienta tras demasiado tiempo sin catar nuevo material de Kate Bush. Es necesario tener en cuenta que hablamos de una artista única, mucho más única si cabe en el momento en el que desarrolló el grueso de su carrera artística. Aerial fue un éxito arrollador tanto de crítica como de público y el único single del álbum, King Of The Mountain, se aupó a los primeros puestos de las listas especializadas tras años con la ausencia del nombre de Kate Bush en un top comercial.
Aunque me han gustado muchos discos publicados en 2015, tengo que confesar que el álbum del año para mí ha sido Aerial de Kate Bush (2005). De hecho, no me consideraba fan de esta mujer hasta haber quedado fascinado recientemente por este doble álbum. Antes de Aerial había escuchado Hounds Of Love, pero la cara B me parecía demasiado experimental. También me enganché por una temporada a 50 Words For Snow, pero Aerial ha sido para mí un punto y aparte a partir del cual reconocer el talento musical de Kate Bush.Empecé escuchando el álbum con bastantes reticencias, ya que abordar un disco tan extenso no es tarea fácil. Sobre todo teniendo en cuenta que hablamos de dieciseis temas rondando la mayoría de ellos los cinco minutos de duración. También la fecha en la que salió publicado me tiraba mucho para atrás. Siempre he situado por un simple prejuicio la época gloriosa de Kate Bush en los ochenta, por lo que un álbum publicado en 2005 no me daba demasiada confianza. Crepuscular, demasiado maduro, aburrido... eran las palabras que se me venían a la cabeza antes incluso de haberlo escuchado. La canción que abre el álbum, King of The Mountain, empezó por barrer de un soplido todos esos prejuicios. A pesar de su excesiva duración, el álbum empezó a engancharme poco a poco y, como la obra maestra que es, lo hizo a partir de temas como π, A Coral Room, How To Be Invisible o Sunset. A partir de esos puntos de anclaje, el resto de canciones Aerial cayeron por su propio peso.Hablamos de un álbum especial dentro de la discografía de Kate Bush, ya que supone una nueva etapa en su carrera musical. Se podría decir que desde su primer álbum The Kick Inside (1978) hasta The Red Shoes (1993) Kate Bush había publicado álbum tras álbum con la periodicidad de un músico más o menos convencional. Sin embargo, a partir de 1993 decide aislarse del mundo y formar una familia a la que se dedicará a tiempo completo. Aerial se hará esperar la friolera de doce años, un tiempo que supondría con total seguridad la muerte comercial para cualquier músico convencional. Sin embargo, la prensa especializada ya se hacía eco de la salida del álbum años antes de que saliera al mercado, hambrienta tras demasiado tiempo sin catar nuevo material de Kate Bush. Es necesario tener en cuenta que hablamos de una artista única, mucho más única si cabe en el momento en el que desarrolló el grueso de su carrera artística. Aerial fue un éxito arrollador tanto de crítica como de público y el único single del álbum, King Of The Mountain, se aupó a los primeros puestos de las listas especializadas tras años con la ausencia del nombre de Kate Bush en un top comercial.