Así que pude saber que David Gilmour (Pink Floyd) se fijó en ella e inmediatamente le consiguió un contrato discográfico.
Pero antes de grabar, Kate se preparó a conciencia durante tres años.
No sé si le hacía falta, pero el resultado es apabullante. Un disco maravilloso, especatacular y perfecto.
Y con sól 19 años. Ahí es nada.
Pop, Rock, Sonidos psicodélicos están aquí juntos pero no revueltos. Además sumemos la estupenda voz, capaz de adaptarse a todo lo que se le ponga por delante. Eso lo pienso ahora, cuando era más mozalbete en algún momento me sonaba más histriónica.
Aquí podemos encontrar tal vez su mayor éxito y para mí una de las baladas más bonitas que se han hecho nunca Wuthering Eights, un tema que recuerdo escucharla antes de saber de quien era y que me ponía los pelos de punta.
No puedo destacar ninguna más porque creo que sería injusto, porque como dije antes el nivel me parece altísimo.
Todo esto entiendo que suene exagerado para muchos, pero es que cuando lo escuché por primera vez detenidamente quede boquiabierto porque no me había fijado en la calidad que atesoraba el disco completo.
Ideal para escuchar siempre. Pero personalmente prefieron escucharlo en la intimidad, la intimidad de las noches. En ese ricón en que sólo estás tú con tus pensamientos y con la buena de Kate que te susurra solo a ti.