kavafiana

Por Calvodemora
la cosecha confía ciegamente en la cosecha, la cosecha alumbra prodigios, mojada de gozos, golosa en lujuria, la cosecha carece de preámbulos, la cosecha no atiende a metafísicas, nunca obedece, desoye la luz cartesiana y homicida, la cosecha, esto dilo hacia adentro, esto apréndelo, alumbra prodigios, conforme a esta evidencia hocica la voz en la tierra, oye cómo respira, ahí en ese pulso de aire tragado residen los dioses propicios, los únicos dioses creíbles, los demás son figurantes, no saber al final qué se nos cuenta, si las virtudes de la cosecha o el morbo de la ceniza
puro por lo visto es posible todavía la pureza, negar la pérgola vistosa de las palabras, discurrir argumentos muy nobles, ver en cada hijo de puta suelto por el mundo un bardo, un cómplice, un descarriado al que es posible volver a sentar en el primer banco de la iglesia
las calles me escoltan al sueño las calles me escoltan al sueño, pierdo la voluntad, el abandono es dulce, el vértigo es un placer que no se deja manejar en palabras, en el vértigo me aguarda el asombro o es al contrario y la fiebre de la sangre, suicida, ciega de colores, me impide razonarlo todo, hacer que la razón fornique con el lenguaje, pero yo soy un poeta y ahora estoy sentando en un bar, leyendo la prensa, pecando como puedo
dinosaurio caso de que esto acabe como sospecho, enterradme
cátulo imposible acompañar a cátulo de putas por roma, ya no hay cátulo, roma está intransitable y los burdeles hace tiempo que fueron derribados para que las putas se confundieran con las mujeres de los cónsules y de los palafreneros
tierno a fuerza de repeticiones, uno se hace a verse ya un punto sensible, se encabrita el corazón en un arcoiris, la noche iza mi hombría, me duermo con un alejandrino en el pecho, espuma distraída que el amor cincela en el aire
todas las vidas que uno ha ido viviendo conducen a alguna parte bourbon con bach esta noche, el mayor de los placeres mientras afuera sucede todo lo demás
me sobresalta la barba en el espejo me sobresalta la barba en el espejo, el cansancio en el verano, páginas que no escribo, todas las cosas inútiles súbitamente imprescindibles
roberta pedon este vicio mìo de pecar siempre en las mismas obscenas cosas, este encendido instante de lujuria a boca llena, este vórtice de luz derramada, sed sin sombra, el adjetivo improbable con el que cerramos el día y los ojos e ingresamos, ufanos, imbéciles, en el sueño
kavafis tonight pensar es una actitud de riesgo, una invitación al desorden, escribir es ordenar el riesgo, considerarlo, se vive al margen, se vive afuera, el gran vividor es siempre el poeta, esta noche kafavis