"Cada vez hay más llamamientos a Rusia para que los salve de ese caos. Nos ponen en una situación muy difícil", explicó Lavrov.
Las afirmaciones de que en la zona del conflicto hay gran número de armas rusas es un "argumento absurdo", anunció el ministro de Exteriores ruso. "Nos preocupa que en lugar de ser consciente de la responsabilidad de lo que sucede, Kiev y los países de Europa Occidental están tratando de culpar a Rusia, usando como argumento principal la presencia de armas rusas en las zonas de conflicto. Este argumento es absurdo, allí no hubo ni hay armas rusas", dijo.
Según Lavrov, "recientemente por la tele mostraron que las formaciones armadas ilegales disponen de armas estadounidenses". "Hago hincapié en que se trata de armas en manos de grupos armados ilegales, y no de unidades del Ejército de Ucrania", dijo el canciller ruso.
"Rusia detendrá cualquier intento de desatar una guerra civil en Ucrania", dijo Lavrov. Además, lamentó que "Kiev o no puede o no quiere controlar a los extremistas" que continúan sus actividades.
"Los intentos de aislar a Rusia son inútiles, es imposible hacerlo", recalcó el canciller ruso y añadió que "en lugar de imponer ultimátums y sanciones amenazantes, Washington debería ser plenamente consciente de la responsabilidad de aquellos a los que llevó al poder en Kiev", dijo.
En este sentido el diplomático ruso señaló que "gran parte del mundo no quiere el aislamiento de Rusia y nunca se unirá a estos intentos" de aislamiento. "Somos un poder grande, independiente y sabemos qué queremos", enfatizó.
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