Mientras viajaban, un encapuchado se cruzó en su camino y los llevó hasta un enorme y extraño edificio. Estaban ante el "Castillo del Olvido" donde, a cambio de perder recuerdos a medida que subiesen de planta, recuperarían aquello olvidado pero que el corazón aún guardaba en lo más hondo. ¿Pero quiénes son los encapuchados que dicen formar la "Organización XIII"? ¿Y quién es en realidad la niña llamada Naminé que empieza a recordar Soraa medida que avanza?
Por su parte, Riku se despierta en un espacio vacío, gris, sin nada a su alrededor. Una voz le habla y le ofrece la oportunidad de seguir durmiendo, sin sufrir, o salir de ahí y enfrentarse a lo que venga. Así, Riku acepta un naipe de Bastión Hueco que se materializa delante de sus narices y, al cogerlo, aparece en el sótano más profundo del Castillo del Olvido ¿Qué se encontrará a medida que suba?HistoriaY aquí es donde empezó a complejizarse la trama de la saga jugando con diferentes líneas argumentales, dobles, versiones "incorpóreas" de ciertos personajes... De todos modos, nada comparado a lo que vendría luego.
Había dicho en la reseña del anterior que aunque era en general muy sencillo, tenía sus giros de guion un tanto extraños. En éste, en realidad, tampoco se va demasiado de madre. Sirve de nexo de unión con el Kingdom Hearts II y, por el planteamiento lineal, no tiene espacio para ser una absoluta locura, pero deja plantadas las semillas de la ida de olla en que se va a convertir la serie.
De fondo tenemos durante todo el juego, en la parte de Sora, una reflexión sobre los recuerdos. Es cierto que la memoria es compleja y juega malas pasadas: nos olvidamos de algunas cosas pero de otras no; con el tiempo, hay recuerdos que se distorsionan y no reflejan del todo la realidad de lo que pasó; con suficiente luz de gas podemos llegar a dudar de todo lo que hemos vivido y ya no estamos seguros de nada; hay recuerdos traumáticos que la mente es capaz de bloquear; etc. De todos modos, para cuando llegamos al final y descubrimos qué es lo que realmente pasa con estos recuerdos que se le despiertan y lo que sucederá después de vencer al malo final, todo acaba siendo un tanto decepcionante.
Pero en este juego no sólo tenemos la historia de Sora, a quien seguimos mientras sube por el "Castillo del Olvido", también sabemos qué fue de Riku tras la mala situación en que quedó al acabar el juego anterior. Su historia se basa en la redención por lo que hizo mal y la autoaceptación de quién es ahora. Aunque en niveles es parecido a Sora, por la complejidad menor de jugar con él (ya iré a esto luego) y por tener menos escenas, se nota que no deja de ser secundaria en el conjunto del juego. De todos modos, Riku es, sin lugar a dudas, el personaje más complejo y de mejor evolución de la saga. En comparación, Sora sigue siendo igual de buenazo, plano y, por qué no decirlo, aburrido, que ya era antes.
Algo interesante de la trama de Riku es que se desarrolla en paralelo a la de Sora, complementando hechos que le ocurren a él que no terminábamos de entender y, además, su historia finaliza un poco después de la del héroe de la llave espada.Duración
Como siempre digo, este apartado depende de si entendemos la duración como pasarnos el juego simplemente o completarlo con todos los trofeos. En el primer caso, sobre todo si elegimos el modo fácil, tenemos un juego breve. Sin embargo, si hablamos de completarlo todo, la cosa cambia muchísimo.
Además de eso, uno de los trofeos es hacer la colección completa de todos los naipes del juego y conseguir algunos será un dolor que requerirá de mucha paciencia y muchas peleas con sincorazón. Y sumad a eso llegar al nivel 99 con ambos protagonistas o los múltiples intentos para conseguir los trofeos de los minijuegos. Vamos, que horas para dedicarle sin duda tendréis si queréis ir a por todo. Sino, la verdad, creo que en unas 40 horas en modo fácil se pueden hacer las dos historias.
JugabilidadLas plantas del Castillo del Olvido
Cada sala tiene un requisito para abrirla, no vale usar cualquier naipe. Puede ser usar uno de un color determinado o un naipe en relación a algún valor numérico. Y es que éstos van del 0 al 9 y, por ejemplo, para abrir una sala puedes necesitar un naipe de valor igual o mayor a 5. Los naipes mapa se consiguen ganando peleas contra grupos de sincorazón y, como máximo, podemos tener 99, que parece mucho pero no es tanto cuando hay tantos tipos y encima numerados.Hay que reconocer que la dinámica es terriblemente repetitiva. Las salas, al final, son casi las mismas de un mundo a otro y sólo cambia el "atrezzo" y las texturas. Hay ligeras variaciones entra la sala que da un mismo naipe en un mundo y en otro, pero son mínimas. No se puede negar que el juego resulta un tanto cansino con este sistema.DesarrolloComo en el anterior, Sora lucha, gana experiencia y sube de nivel pero hay una diferencia y es que somos nosotros quienes elegimos en qué se va a ver reflejada esa subida de nivel. Además, no le podemos subir la fuerza o defensa, sólo podemos elegir entre tres opciones: vitalidad, PN (Puntos de Naipe) o "Trucos" que usar en combate.Por otro lado, Sora lucha solo. Ni Donald, ni Goofy, ni los aliados puntuales de ciertos mundos le acompañan salvo si los "invocamos", por lo que no tienen ningún desarrollo.Las peleas con naipesY aquí llegamos a la parte más criticada del juego desde su versión original en la GBA. Es un sistema muy estratégico, que requiere usar más la cabeza antes y durante las peleas que en el anterior, que era un auténtico machacabotón. No obstante, diría que se les fue la mano con la complejidad. A ver si puedo contar un poco cómo va de manera breve.Sora no lucha de manera normal, sino con naipes. Un naipe de ataque supone un golpe; uno de hechizo piro, lanzar la magia en modo básico. Así, tenemos tres barajas (yo las uso así: la primera para peleas contra sincorazón normales, la segunda para la mayoría de jefes de mundo y la tercera, más hacia el final, a base de trucos para las peleas contra la Organización XIII) que las administramos con los naipes que vamos consiguiendo. Pero no podemos meter todos los que queramos, hay un máximo marcado por los PN que va aumentando de 25 en 25 al subir de nivel cuando elegimos esa opción, como dije antes. Así, cada naipe tiene un valor de PN que, al meterlo en la baraja, va sumando y entre todos no podemos superar los PN máximos que en ese momento tiene Sora. Los naipes de combate, además, tienen un valor de 0 a 9, igual que los de mapa. A mayor valor, más PN requieren para meterlos en la baraja y menos cartas podrán entrar pero más fuerte serán.
El mayor aporte a la saga que da este juego es conocer a buena parte de los miembros de la "Organización XIII". Curiosidades de la vida (¡JA!), a pesar de que son 13 miembros, de ahí su nombre, sólo hay una mujer en el grupo: Larxene. ¿Quién dijo "Principio de Pitufina"? Una rubia maquiavélica, cínica y violenta. Luego, aparte, tenemos a Naminé de quien no se puede decir mucho por no destripar. En su caso, una niña dulce, toda una doncella en apuros. No podría ser más descarado e insultante, tenemos los arquetipos de la santa y la p*ta. Personajes masculinos ricos y variados los hay a puñados en la serie. ¿Femeninos? No merecen el esfuerzo.
Encima, si ya Kairi tenía poco peso en el anterior, aquí desaparece por completo y se remarca el protagonismo de los dos amigos por encima de ella teniendo Riku su propia aventura en la que evoluciona como personaje. Luego, en concreto la mini-historia que se desarrolla en el mundo de Aladdin, tenemos a Jasmine inconsciente en las dos (de cuatro) escenas que tiene la trama. No es que en el anterior tuviese una gran aportación pero al menos hablaba, por no comparar con su carácter en la película. De verdad que me encanta esta serie de videojuegos pero en este apartado hace aguas de una manera terrible.ConclusiónEl juego hace de nexo entre el Kingdom Hearts y el Kingdom Hearts II aportando algunas claves necesarias para el segundo y numerosas horas de entretenimiento a la que quieras echar el rato consiguiendo los trofeos. No obstante, resulta muy repetitivo en su desarrollo y largo para la poca trama que realmente tiene. El sistema de batalla es un dolor de cabeza hasta que se le pilla el truco (nunca mejor dicho) y, aún así, las peleas contra jefes se pueden atragantar si no se dan con estrategias adecuadas. En general, me ha gustado, pero reconozco que da mucha pereza y no es de los que apetezca rejugar.