La vicepresidenta de la Comisión Europea (CE) y titular de Agenda Digital, Neelie Kroes, pidió a los países impulsar las redes de acceso de nueva generación a internet según las recomendaciones comunitarias, y afirmó que Bruselas está dispuesta a actuar si no se aplican de forma apropiada.
La comisaria subrayó la importancia de que los reguladores nacionales de las telecomunicaciones apliquen de manera ‘consistente’ los principios recomendados por Bruselas en un documento sobre el acceso a redes de nueva generación publicado el año pasado.
Entre las sugerencias de la CE destaca que, cuando los operadores gocen de un significativo poder de mercado en una infraestructura de banda ancha y se cumplan las condiciones para una regulación ‘ex ante’, los reguladores nacionales deben establecer un acceso basado en los costes para los operadores alternativos.
‘Tener éxito en la ambición de proporcionar la ‘banda ancha para todos’ es fundamental para nuestro futuro económico’, indicó, pero agregó que ‘cuando el mercado de la banda ancha en la UE avanza hacia más altas velocidades con la fibra y el cable, el tiempo está en nuestra contra’.
Señaló que la actual tasa de nuevas conexiones de banda ancha es ‘demasiado bajo’, y que algunos reguladores nacionales ‘no están jugando según las reglas’ de la UE sobre redes de nueva generación de internet.
Para Kroes, esa recomendación de la Comisión ofrece ‘claridad reguladora’ y unos ‘márgenes atractivos y muy sólidos rendimientos’ para los inversores, a la vez que garantiza a otros actores del mercado una ‘oportunidad justa’ para competir.
‘Estas provisiones suponen un buen equilibrio entre los incentivos a la inversión y la necesidad de proteger la competencia’, subrayó, y aseguró que se trata de un asunto de ‘imparcialidad’ y de ‘mantener el mejor clima posible para las inversiones’.
La comisaria pidió asimismo mayor cooperación entre el sector de la banda ancha y los gobiernos, y puntualizó que ‘ni los reguladores ni los operadores pueden hacer frente a nuestros desafíos de banda ancha solos; nos necesitamos unos a otros’.
Por su parte, el presidente del comité ejecutivo de la Organización Europea de Operadores de Telecomunicaciones (ETNO), Luigi Gambardella, recordó que la inversión necesaria en nuevas redes en Europa es de unos 58.000 millones de euros para alcanzar una velocidad de 30 megabytes por segundo (Mbps), y de 268.000 millones para llegar a los 100 Mbps en el 50% de los hogares.
‘La magnitud de estas cifras de inversión requiere un equilibrio entre la contribución privada y de los fondos de los países y de la UE, que debería ser dirigida cuidadosamente para complementar y no desplazar la inversión privada’, apuntó.
‘Las nuevas redes requieren una regulación que tenga más en cuenta los diferentes niveles de competencia en los mercados para estimular unas inversiones arriesgadas’. concluyó.
Fuente: Cibersur