"L'esmorzaret": opíparo bocadillo de media mañana y algo de picar, típico valenciano.

Por Ximoas Jas

Algo que creeemos los valencianos, que es muy español, es el "almuerzo". Nuestro "esmorzaret" (aunque realmente se llame "esmorzar", pero como los valencianos utilizamos el diminutivo para casi todo...). Pero no el almuerzo como comida central y principal del día, no. Es ese bocadillo de media mañana.. sobre las 9.30h o las 10h de la mañana, acompañado de aceitunas, cacahuetes, alguna "tapita" más, su caña y su café, cuando no carajillo, que tomamos para coger fuerzas. Pues resulta que no, que lo "típico" español, es tomar un pincho de tortilla o cualquier cosa a esas horas y no hacer una comida tan calórica como hacemos por estos lares. Aunque el mismo significado de la expresión "lo típico", es tremendamente ambigüo.

Como dice Jaume Lita en lasprovincias.com: "El almuerzo es un momento típico y casi único de la Comunitat Valenciana. En otros lugares del territorio nacional no se da ese momento de media mañana en el que parar para comer un bocadillo bien nutrido. En tiempos de pandemia, la hostelería se ha visto golpeada tanto por el cierre total de marzo y abril como las sucesivas restricciones que limitan el trabajo a realizar desde detrás de las barras y cocinas. Los almuerzos se han seguido celebrando y en cada establecimiento se sigue una tradición muy particular. Bocadillos gigantes, selectos, únicos y tradicionales, no hay dos almuerzos iguales". Os recomiendo que busquéis imágenes en la red, sobre el "típico almuerzo valenciano" (poned estas tres palabras en Google imágenes). Muchos no creeréis que se llega a comer tanto a esa hora de la mañana, pero os aseguro, que así ocurre.

En este 2020 la pandemia no ha podido con los premios Cacau d'Or, galardones en los que se eligen los bares con los mejores almuerzos de la Comunitat Valenciana. En otras ediciones los reconocimientos se limitaban a tres establecimientos, pero en esta ocasión se han seleccionado 7 bares de las provincias de Valencia (6) y de Castellón como nuevos templos del 'esmorzaret'.La entrega de premios tuvo lugar el pasado sábado 28 de noviembre.. y al acto acudió el concejal de Turismo del Ayuntamiento de Valencia, Emiliano García. Los premios Cacau d'Or, nacieron en 2015 de la mano de la comunidad virtual #LaCulturaDelAlmuerzo, con el apoyo de Amstel. Atendiendo a la nota difundida por la organización, los establecimientos ganadores con los premios Cacau d'Or 2020 son los siguientes:- Casa Paquita, de Eslida (Castellón), del que la organización destaca que «es uno de los locales preferidos por los ciclistas que recorren la Sierra de Espadán para reponer fuerzas en sus rutas».- Fernandet, de Les Palmeretes (Sueca), «tiene fama por sus propuestas con producto fresco del mar», indican.- Casa Tere, de El Grao de Gandía, «templo de los guisos, calderos y elaboraciones tradicionales».- La Aldeana de El Cabanyal, «transforma en sugerentesbocadillos que incorporan recetas clásicas con nuevos aires».- Ramos, en San Antonio de Requena, «representa los almuerzos a la brasa, con embutidos y productos cárnicos de primera calidad».- Ca Tomás de Alzira, que «combina el almuerzo popular con propuestas del senyoret, servidas en su comedor privado».- Reyton, de Sueca, con «una de las mejores relaciones calidad precio para unos rotundos bocadillos».Yo he almorzado en varias ocasiones, de eso ya hace tiempo, en Casa Paquita, Eslida, precisamente haciendo rutas ciclistas de aficionados. Era más jóven y estaba más fuerte, pero ese bocadillo te daba fuerzas para subir el Tourmalet... aunque el puerto de Eslida es de primera categoría y creedme cuando os digo, que se empina como un muro. Al menos para un simple aficionado, claro está. Yo creo que iba más por los almuerzos que por el ejercicio, las rutas y la bicicleta.Ahora lo "practico" a la misma hora, pero en el bar de al lado de la oficina. Es un momento, en cierto aspecto "entrañable". Donde en la misma mesa, se sientan los de todos los días. Y no se vuelven a ver, hasta el día siguiente. E incluso, algunos, entre ellos, es el único momento en que se ven, durante sus vidas, cotidianamente.Recomiendo a cualquiera que visite estas tierras, que madrugue, desayune flojo y lo pruebe. Aquí es algo tan típico como lo puede ser, una caña y una tapa, antes de cenar. Quien dice una caña, dice un "chato" de vino. Y quien dice una tapa, dice un "pincho" o un "pintxo".