Dorothy Arzner (1897-1979) fue un caso único en la historia del cine americano, la única mujer que consiguió hacerse una carrera profesional como directora en la época dorada de Hollywood. El Festival de San Sebastián dedica en su 62 edición un homenaje a la obra de Arzner, considerada hoy una pionera de la integración de la mujer en la industria cinematográfica, y reivindicada como una cineasta con un estilo y personalidad propia que le valieron un indudable prestigio dentro del sistema de estudios de Hollywood.
Arzner presionó a Paramount para que le dejara dirigir una película, amenazando a los directivos del estudio con aceptar una oferta de un estudio rival, Columbia. Finalmente, debutó en la dirección con el film Fashions for Women (La reina de la moda, 1927) y al año siguiente se convirtió en la primera mujer de la historia que dirigió una película sonora, Manhattan Cocktail (1928). Arzner dirigió 15 películas más a lo largo de la década de los treinta y comienzos de los 40, y trabajó con estrellas de Hollywood como Clara Bow, Katharine Hepburn, Fredric March, Rosalind Russell, Claudette Colbert, Maureen O'Hara o Joan Crawford en comedias y melodramas que prestaban una especial atención a los personajes femeninos: The Wild Party (La loca orgía,1929), Anybody's Woman (La mujer de cualquiera, 1930), Sarah and Son (1930), Honor Among Lovers (Honor entre amantes, 1931), Working Girls (1931), Merrily We Go to Hell (Tuya para siempre, 1932), Christopher Strong (Hacia las alturas, 1933), Nana (La reina del boulevard, 1934), Craig's Wife (La mujer sin alma, 1936) o The Bride Wore Red (1937).
Aunque su nombre cayó progresivamente en el olvido, la carrera de Arzner fue reivindicada en la década de los 60 por los movimientos feministas y fue objeto de varios homenajes, entre ellos el del Sindicato de Directores de América en 1975. Hoy su filmografía no sólo es revalorizada por constituir una insólita excepción en la historia del cine americano, sino por sus valores intrínsecos. Arzner dejó su huella a través de una serie de películas de refinado estilo visual que cuestionaban los tradicionales roles sexuales de la época y el papel de la mujer en la sociedad o que, según algunos críticos, introducían velados subtextos homosexuales en la rígida estructura del Hollywood de la época.
La retrospectiva que el Festival de San Sebastián dedicará a Dorothy Arzner estará organizada en colaboración con Filmoteca Española. El ciclo se complementará con una publicación sobre su figura y su obra.