La Agencia Tributaria al servicio de algunos defraudadores

Publicado el 13 julio 2015 por Msnoferini

Cada día aparecen un buen número de noticias dignas de ser publicitadas y reflexionadas pero desgraciadamente quien suscribe estas pocas líneas no dispone de excesivo tiempo para tanto anáilisis. Por lo tanto he cogido la costumbre de dedicar mi poco tiempo libre a darle una mayor difusión a algunas noticias que podrían pasar más desapercibidas o aquellas que a mí personalmente me indignan más. Y dicho esto quiero difundir una noticia aparecida el viernes pasado y que en esta ocasión pone al descubierto las miserias del anterior gobierno del este país, el gobierno del PSOE.

En una noticia publicada por el diario el País en su edición del viernes pasado (10/07/2015) se explicaba que en un informe enviado al Juzgado de Instrucción 37 de Madrid por la Agencia Tributaria, sobre la investigación que se llevó a cabo por la decisión tomada en su día de no abrir un procedimiento de inspección contra los 659 contribuyentes españoles que aparecían en la lista Falciani –lo que evitó una acusación por delito fiscal que en muchos casos podría haber supuesto la cárcel- fue parte de una estrategia diseñada por la propia Agencia Tributaria, durante el anterior gobierno del PSOE, para como se dice vulgarmente salvarle el culo a unas cuantas importantes personalidades de nuestro país, como pudo ser el ya fallecido presidente del Banco de Santander, Emilio Botín.

El informe desvela que la Agencia Tributaria en lugar de actuar de la forma habitual, es decir, abrir una inspección, se limitó en hacerles llegar a estos 659 defraudadores un requerimiento en el que se les daba un plazo de 10 días para que presentaran declaraciones complementarias sobre los fondos que tenían ocultos en el HSBC de Ginebra (Suiza). Esa decisión permitió regularizar su situación a 306 de esos contribuyentes sin tener que afrontar un juicio, aunque las cantidades defraudadas superaran, en muchos casos, los 120.000 euros, el límite a partir del cual el fisco considera que existe delito fiscal, castigado con hasta seis años de cárcel.

En este proceso en el que se investiga esta irregular forma de amnistía permanecen imputados, por un posible delito de prevaricación, dos directores de la Agencia tributaria del anterior gobierno.

Como siempre, en este injusto sistema en el que nos ha tocado vivir, se pone de manifiesto que por mucho de que ese famoso eslogan de la Agencia Tributaria diga eso de “hacienda somos todos” pero es evidente de que no todos somos tratados por igual.

MSNoferini