La apuesta española del propietario de la operadora de móviles Digicel

Publicado el 05 octubre 2011 por Quim @Quim_Marques
Dennis O’Brien es el accionista mayoritario del PGA Golf Club, ubicado en los entornos de Caldes de Malavella, en la provincia de Girona, donde después de 20 años de existencia y consolidado ya como uno de los mejores campos de golf de Europa (octavo en el último ranking de Golf Word), ha decidido crear un resort de golf exclusivo.
Sin embargo, la apuesta de este empresario irlandés (53 años) por el golf no es la más importante. Su actividad empresarial principal se centra en torno a las telecomunicaciones. Es propietario de la operadora de móviles Digicel, presente en 32 mercados de dos continentes.
Su historia empresarial se inicia muy joven. Después de pasar por la universidad en Dublín y con un MBA en Boston College, O´Brien montó con veintipocos años una emisora de radio en Dublín que fue el origen de Communicorp, hoy en día una de las redes de radio más extensas de Europa, con 44 estaciones en ocho países europeos.
Con 30 años, en 1991, se asoció a la empresa noruega Telenor y consiguieron la primera licencia de telefonía móvil de Irlanda, Esat Telecom, que posteriormente se vendió a British Telecom (BT) por 2.400 millones de dólares.
Con esa experiencia optó por buscar licencias en países donde las grandes compañías del sector no estuvieran presentes. En 2001 consiguió la primera en Jamaica. Hoy controla la operadora móvil Digicel Group que es líder en muchos de los estados de Centroamérica. Esa marca es tan conocida en esos países como Coca-Cola. Ese es el core business de Dennis O’Brien. Está presente en una treintena de mercados, penetrando en los últimos años fuertemente en algunos estados del Pacífico. En total, Digicel tiene más de ocho millones de clientes y 5.500 empleados.
Con la experiencia de Quinta do Lago, un resort de golf turístico en Portugal, O’Brien pensó que el club de la PGA en Catalunya podría ser una réplica incluso mejor que el resort luso por la atractiva ubicación, comunicaciones, climatología y la excelencia de los campos de golf.
Esa es la única inversión que ha desarrollado en España a pesar que le gusta mucho Ibiza y de niño tuvo una au pair española que le enseño a hablar algo de castellano. Su padre, presidente del consejo de administración de la inversión española, tiene una empresa en Irlanda que se dedica a fabricar aditivos para la comida de caballos de competición. De él aprendió Dennis la visión emprendedora en los negocios.
Además dispone de una flota de aviones corporativos, y una empresa competencia de Infojobs, Irishjobs, con presencia en seis países.
Un resort de lujo en Girona
El complejo deportivo que la Professional Golf Association (PGA) creó en la provincia de Gerona en coordinación con el Real Automóvil Club de Catalunya (RACC) hace 20 años no sigue el modelo de club cerrado ni nació como una operación inmobiliaria sino que fue una apuesta abierta a todos con la excelencia golfista como objetivo.
Tras una primera fase donde se proyectaron dos campos de golf, The Stadium Course y The Tour Course, y el hotel se consolidó el proyecto y se proyectó la infraestructura necesaria para trasmutará en un exclusivo resort de la mano del empresario irlandés Dennis O’Brien donde se invertirán inicialmente 70 millones de euros para crear una zona residencial compuesta por dos sectores principales: La Vinya y La Selva donde se están empezando a construir las primeras viviendas del resort.
Desde el punto de vista societario la marca PGA Catalunya Resort Girona se estructura a través de tres sociedades: PGA Golf de Catalunya (100% propiedad de Dennis O’Brien a través de PGA European Tour Courses); Comercial de Golf (el 82,5% pertenece a Dennis O’Brien, el 2,5% al RACC y el 5% es propiedad de Vichy Catalán); y la propiedad del hotel (donde Vichy Catalán controla el 80% del capital; PGA Golf de Catalunya el 15% y RACC el 5%).
La importante inversión correrá a cargo exclusivamente del empresario irlandés que ya posee otro resort de alga gama en Portugal, Quinta do Lago.
Actualmente el complejo catalán factura nueve millones de euros, la mitad se genera a través de la actividad golfística mientras que la otra mitad proviene del hotel.
Este ambicioso proyecto inmobiliario que prevé estar finalizado en 2019 tendrá 368 viviendas. David Plana, director corporativo de PGA Catalunya Resort, y mano derecha de O’Brien en España, está convencido que una vez culminado el proyecto “se convertirá en el primer resort de Golf de Europa”.
La compañía prevé destinar un 60% de las viviendas a extranjeros, en su mayoría bajo la fórmula de llave en mano. Los compradores pueden escoger entre la adquisición de la parcela, por 350.000 euros, o la de la casa ya terminada, por un millón de euros, opción esta última mayoritaria entre los extranjeros.
La construcción de las primeras villas ya se ha iniciado. Las parcelas que PGA Golf Catalunya ha puesto a la venta cuentan con una superficie de entre 1.200 m2 y 4.000 m2, siendo el ratio de construcción de 1,4 por cada hectárea de terreno. También existe la opción de viviendas adosadas y algunos apartamentos especiales.