No tener familia cercana es una ventaja. No tener amigos es una ventaja. Tener dinero es una ventaja…Todo, ventajas. Está claro que lo de ser “asesina en serie” me va que ni pintado.
No tengo que dar demasiadas explicaciones para justificar mi viaje : a los empleados de confianza y a mi médico. Él fue el que me dio la idea. Consideró que estaba atravesando un estado depresivo profundo por la desaparición del mi marido .Esa fue la explicación más coherente para aquel apego que yo tenía a los cerdos…Cada mañana, me paseaba por las porquerizas y les hablaba…Allí había sido dónde había planificado mi segundo asalto… Con los cerdos del charcutero…
Decidí potenciar ese “estado de profunda melancolía” y busqué información de clínicas privadas en la zona de Benidorm. Una de las más caras, frecuentadas por estrellas mediáticas de medio pelo, me pareció perfecta para mi plan. En la segunda visita, mi médico se quedó profundamente impresionado por el estado apático y de profunda tristeza que mi rostro reflejaba. Me costó horas y horas de ensayo, delante del espejo. Sólo tenía que evocar la cara de mi madre cuando mi padre se retrasaba, por motivos de trabajo. Era pollero…
Me recomendó reposo total, por unos días. “Sería conveniente que te alejaras de los escenarios comunes” me dijo. Y entonces, le hablé de la Clínica , que me la había recomendado una amiga, que era muy discreta, que era cara pero me lo podía permitir,…Eso y un llanto desesperado, agarrada a las solapas de su bata , fue suficiente para que mi médico me ordenara “por prescripción facultativa” mi estancia, una semanita, en la Clínica Las Tuercas en Alhama Springs . Sólo para Vips.
Tengo justificada mi estancia en Benidorm si fuera preciso.
Iré en coche : 729,30 Km . Siete horas y catorce minutos de carretera. Me apetece conducir y, además, es la única forma de poder traer a Paco. No se me ha ocurrido otra forma más eficiente para hacerlo desaparecer que los cerdos, de nuevo.
Controlar el tiempo es muy importante. Mi estancia en la clínica está reservada para nueve días. Debo atraer a Paco en el séptimo día de estancia, camelarlo en el octavo y tenerlo en el maletero, ya despedazado, el noveno por la mañana, cuando vuelva a ponerme en ruta de la clínica a la finca.
Siete horas y catorce minutos en los que el cuerpo (las piezas sueltas) irá desarrollando el rigor mortis. Tengo entre doce y veinticuatro horas, para llegar a mi destino y alimentar a mis cerditos…. Bueno, a los cerdos del charcutero (nunca mejor dicho).
Como en la ocasión anterior, he accedido a la programación de las dosis de alimentación y los voy a dejar tres días sin comer, coincidiendo con mi vuelta. Ningún empleado se interesará por este detalle : son las fiestas del pueblo y nadie pasará a vigilar el proceso…
A unos 10 Km de la clínica hay una casa …vacía. Ya hace más de diez años que está deshabitada.
Antes de iniciar mi estancia en Las Tuercas, he viajado a Benidorm para conocer la clínica. Lo he hecho en avión y he estado un día entero , pasando test y reconocimientos psicológicos previos a mi ingreso. Me he dado en cuenta que , en realidad, esto es un SPA para gente que dice que está estresada o que tiene una crisis existencial. Finalmente, voy a hacer una cura de reposo básica ya que han considerado que mi depresión es exógena y que lo que necesito es…desconexión. Lo que ellos no saben, es que sólo me desconecto, matando… Al final, me voy a pasar unos días de masajes, piscinas climatizadas, ejercicios en el mar y siestas .Muchas siestas…No se me ocurre mejor forma de prepararme para mi misión.
En mis paseos de reconocimiento del terreno (necesario para toda asesina en serie que se precie) he descubierto la casa. Está abandonada y aislada. Muy aislada.
Sólo la ocuparé unas horas…
Todo el proceso de planificación ha sido arduo, muy costoso y estoy agotada. Sé que me queda aún, un largo camino por recorrer. Si todo va bien en Benidorm, deberé plantear la tercera víctima y, después, la forma de significarme al mundo como La Asesina del Pollo pero sin desvelar mi identidad…De momento, mi satisfacción es personal y muy íntima y no necesito hacerlo saber al mundo pero, claro, si sigo estrictamente las características más significativas de una asesina en serie, en algún momento deberé mostrarme. Y elegir a un poli, que será buen tío e intentará pillarme … Será mi némesis. Tendré mi propio gran enemigo…
Esto me marea. No sé si estaré preparada… No sé si sabré hacerlo…
No debo precipitarme. Ya se verá… Ahora, toca Paco.
Tengo que empezar a pensar en mi maleta. No debo olvidar afilar mis tijeras.
Con Paco, me apetecen las tijeras…
Dentro de dos días, ingreso en Las Tuercas.
NB : Los Capítulos anteriores de La Asesina del Pollo, aquí.