Atenea Partenos (Atenea Virgen) era una imponente escultura crisoelefantina (de oro y marfil) de la diosa griega Atenea esculpida por Fidias y erigida en el Partenón de Atenas. La obra tuvo un gran impacto entre sus contemporáneos hasta el punto de que dio origen a una tradición de estatuas crisoelefantinas para los templos y santuarios de los siglos V y IV a. C. como la estatua de Zeus en Olimpia, también obra de Fidias.
Conocemos el aspecto de la estatua por copias de mármol de tamaño mediano de época romana, como la Atenea Vervakeion o la Atenea Lenorman. No obstante, Pausanias (siglo II d.C.) nos dejó una descripción de la obra:
" La estatua en sí está hecha de marfil y oro. En el centro de su casco hay una figura parecida a la Esfinge... y a cada lado del yelmo hay grifos en relieve. ... La estatua de Atenea es de pie, con una túnica hasta los pies, y sobre su pecho la cabeza de Medusa está tallada en marfil. Sostiene una Victoria de aproximadamente cuatro codos y en la otra mano una lanza; a sus pies yace un escudo y cerca de la lanza hay una serpiente. Esta serpiente podría ser Erictonio. Sobre el pedestal está el nacimiento de Pandora en relieve".
La escultura fue montada sobre un núcleo de madera cubierto con placas de bronce moldeadas y recubiertas a su vez con láminas de oro o marfil desmontables:oro para el vestido y marfil para las partes desnudas del cuerpo. El oro utilizado en la escultura pesaba 44 talentos, unos 1140 kg y por si sola, la Atenea Parthenos suponía una parte considerable del tesoro de Atenas. La obra original de Fidias tenía unas dimensiones que alcanzaban los 12 m de altura, comprendido el pedestal de 1,50 m de alto en el que aparecía esculpido un friso con el tema del nacimiento de Pandora.
Su coste debió estar cerca de los 700 talentos, la misma cantidad que una flota de 230 trirremes, lo cual puede dar una idea de la enorme cantidad de dinero invertido no sólo en esta obra sino también en el edificio que la alberga y al que dio nombre: el Partenon.
La estatua se perdió en el siglo V d.C, cuando los cristianos la trasladaron a Constantinopla.
La estatua de Zeus en Olimpia
El Templo de Artemisa en Éfeso