Oswaldo Guayasamín
Resarcen en mí sus eufonías, de transparencias perdidas entre líquidos sueños
y aspiraciones malogradas.
Acordes celestes de ritmo inaugural
que estremecen el gozocuando escucho los versos imprescindiblesde los poetas que se comprometieron con las alturas dolorosas de sus épocas.
No hay pericia, ni talento, para la vocación de emularles, ni siquierapara versificar la sensualidad que se esparcepor los vientos que traslucen los cuerposde las hembras que me inundan.
La inspiración me presenta tuétanosde incomprensibles durezasy el verso escapa librehacia una luzdonde el asombro me incapacitacon la autonomía de mis manos.
Pichy