La batalla más antigua

Publicado el 10 julio 2014 por José Alfonso Pérez Martínez

O, por lo menos, la más antigua que conozcamos. Se trata de la batalla de Megiddo, que tuvo lugar en el año 1479 antes de Cristo, entre Egipto (reinando Tutmosis/Tutmés III) y un grupo de reyezuelos rebeldes cananeos. Eric H. Cline, en su ensayo "La guerra de Troya" nos habla de esta batalla de hace casi 3500 años:
Especialmente durante los años que transcurren entre el 1500 y el 1200 aC , hubo cierto número de grandes batallas además de la presunta Guerra de Troya, libradas bien entre las diversas grandes potencias de la época o por alguna de ellas contra potencias menores durante períodos de expansión. Por ejemplo, además de las batallas contra los Pueblos del mar en 1207 y 1177 aC, los egipcios combatieron en Megiddo (el Armagedón bíblico), situado en el Israel moderno, tres siglos antes, en 1479 aC, contra un ejército de rebeldes cananeos. La batalla finalizó con una victoria decisiva para los egipcios, guiados por el faraón Tutmosis III, y sus detalles fueron debidamente reflejados en un muro del templo de Karnak en Luxor, Egipto, convirtiéndola en la primera batalla registrada de la historia.    

Mario Liverani, en su gran libro "El antiguo Oriente" nos habla también de esta batalla, englobándola en toda una serie de campañas para consolidar el control egipcio sobre Palestina y gran parte de Siria:
Durante la primera mitad del siglo XV (aC), la región fue ocupada a raíz de las expediciones de Tutmosis III, con las que consolidó el control egipcio no sólo sobre toda Palestina, sino también sobre la mitad de Siria. Las campañas, sistemáticas y repetidas, se pueden agrupar en tres fases: la primera (gran campaña del primer año) culminó con la batalla de Megiddo, que aseguró a Tutmosis el control definitivo de Palestina. La segunda fase (campañas de los años quinto, sexto y séptimo) se saldó con la conquista de Qadesh y el sur de Siria. La tercera fase (campaña del octavo año y siguientes) llevó a Tutmosis hasta el Eúfrates, en pleno territorio mitannio, al que le arrebató toda la costa hasta Ugarit y el valle del Orontes (con Tunip y Nukhashe).

Relieve del templo de Karnak, en Luxor. Se ve a Tutmés III sujetando por la cabellera a sus enemigos vencidos en Megiddo.