La batalla por Sidi Barrani - 10/12/1940.

Por Lupulox

Camaradas,
Los británicos le han dado hoy otro gran disgusto al Duce. Las tropas británicas han proseguido su avance en Egipto y hoy ha caído en sus manos la plaza de Sidi Barrani.


Movimientos británicos durante ayer y hoy.

O’Connor casi no puede creerse su suerte. En el primer día de la Operación Compass ha logrado unos progresos inauditos. En primer lugar, ha conseguido eliminar la principal fuerza móvil de Italia, el Grupo Maletti, acabar con tres fortalezas italianas de primera línea y cortar la carretera Sidi Barrani – Buq Buq, impidiendo la retirada de importantes elementos italianos. Aprovechando su ventajosa posición, O’Connor ha enviado a su 8º Regimiento de Husares hacia el oeste para disuadir a los habitantes y guarniciones de los Fuertes Sofafi y evitar su participación en los combates así como su evacuación. O’Connor tiene claro cuál es el siguiente paso a dar y esta mañana ha impartido las órdenes oportunas: Sidi Barrani debe caer.


Campamento fortificado en Sidi Barrani.

Tropas motorizadas británicas hacia Sidi Barrani.

A primera hora de la mañana, elementos motorizados de la 4ª División India se han lanzado hacia Sidi Barrani. El avance de los camiones británicos, sin apenas apoyo, los ha dejado expuestos al fuego italiano, pero han optado por fiarse de su suerte. A las 5:55, se han dado cuenta de su equivocación cuando los primeros proyectiles de artillería han comenzado a caer a su alrededor. Los indios, esclavos coloniales al servicio del Imperio Británico, se han echado cuerpo a tierra. El cañoneo ha continuado aumentando progresivamente hasta convertirse en un auténtico infierno y los británicos han sufrido cuantiosas bajas, pero han avanzado lentamente. Los británicos pueden ver las posiciones de artillería italiana a un kilómetro escaso, parcialmente enterradas en la arena. Los soldados del Duce les han arrojado de todo: proyectiles antitanque, balas de ametralladora… A las 6:20, los camiones han reanudado el avance. Uno de los vehículos británicos que ruedan en cabeza y que transporta una pieza de mortero ha estallado en una gran bola de fuego y otras columnas de fuego han comenzado a brotar en toda la columna, a medida que la artillería italiana ha ido alcanzando uno a uno a los vehículos cargados de tropas. La columna, finalmente, ante el fuego de ametralladoras pesadas, ha tenido que detenerse.


Posiciones británicas sometidas al fuego de la artillería italiana.

Los británicos han bajado de los camiones y han comenzado a cavar hoyos para intentar protegerse del mortífero fuego de la artillería. A las 7:00, han solicitado por radio apoyo de la artillería. Uno de los operadores de radio ha resultado muerto mientras transmitía el mensaje. Los británicos han disparado a ciegas con sus armas y no han logrado otra cosa sino ver cómo otro proyectil italiano ha reventado en pedazos dos transportes de municiones. Finalmente, la artillería británica ha entrado en acción y lo que ha quedado de la columna ha podido volver a montar en los camiones y reanudar el avance.

Los británicos al fin columbran su objetivo.

Sidi Barrani, bajo el fuego de la artillería británica.

Este penoso avance les ha dejado claro a los británicos que los soldados del Duce no tienen ninguna intención de ponerles las cosas fáciles pero finalmente, a las 13:30, se han situado en posición al sur y al sudoeste de su objetivo: Sidi Barrani. A las 16:00, con el apoyo de toda la artillería de la división y tanques del 7º Regimiento Real, se han lanzado al asalto. Después de sangrienteos combates, la ciudad ha caído al anochecer, y los restos de las dos Divisones libias y la 4ª División de Camisas Negras han quedado atrapados entre las tropas indias y la Fuerza Selby, al este.

Viva la Italia!Vinceremo!