Esta semana están actuando en el Palacio de Festivales de Santander. Los precios no son baratos, pero merece la pena (el domingo es algo más barato).
Tenéis que tener en cuenta que dura casi tres horas (descanso incluido), para que os hagáis una idea, yo he ido con un niño de tres años y, aunque no ha entendido mucho de la historia, le ha gustado mucho y no hizo ni un amago de dormirse.