No podrás tener hijos si montas en bici.
Una muy grata sorpresa. Fresca y ágil. Con momentos divertidos y críticas a la férrea sociedad dominada por el fanatismo religioso.
La mujer doblegada esperando a que él vuelva a casa o la elija como esposa, a pesar de no poder darle un hijo varón. Rostros cubiertos, velos negros. Mejor no trabajar cerca de otros hombres.
Niñas educadas para ser sumisas. Juegan en el patio y han de entrar corriendo si en las azoteas hay alguien del sexo masculino que las pueda observar aunque sea a distancia.
Hay un concurso del Corán dotado con un fabuloso premio en metálico. Han de memorizar y entonar de forma correcta. Si tienen la regla no pueden tocar las sagradas escrituras. Cualquier sospecha es pecado y se castiga con la humillación pública. Las fotografías y la música moderna están prohibidas.
Entre todas esas connotaciones, a ratos muy didácticas, transcurre el día a día de la maravillosa niña protagonista. Empeñada en lograr esa bici cueste lo que cueste.
Me encantan las escenas con el niño, y con la madre en la cocina o en la terraza de la casa.
Actrices que destacan y una fotografía espléndida. En mi opinión, muy recomendable, incluso para los más reticentes.
La voz de una mujer es su desnudez.
Título original Wadjda. Dirección y guión Haifaa Al-Mansour. Música Max Richter. Fotografía Lutz Reitemeier. RepartoReem Abdullah, Waad Mohammed, Abdullrahman Algohani, Sultan Al Assaf, Ahd Kamel. Arabia Saudí 2012, 98 min.