Emma se marcha a Londres y se alojará en la casa de la señora Bellyard, la típica dama inglesa, desconfiada y cotilla, imprescindible en una historia de este tipo. También conoce al español capitán Laredo, un hombre solitario que al principio no le pondrá las cosas fáciles pero al que poco a poco irá conociendo y comprendiendo. Juntos tendrán que emprender una investigación que les lleve hasta el Barón, el principal sospechoso del robo de la cabeza de Diana. Así, Emma tendrá que meterse en ambientes poco apropiados para una chica de su clase y posición, aunque todo esfuerzo merecerá la pena si es para seguir el rastro de Alonso Bando.
Emma se verá inmersa en la aventura de su vida, recorriendo las calles de Londres, sorteando bombas y calaña de todo tipo. Se hará amiga de Vivien, una mujer de la calle y que vive una relación asfixiante con Dorian, un tipo peligroso que tiene negocios con el Barón y por tanto, le puede dar una pista de dónde se encuentra la deseada cabeza pero, ¿qué tiene que ver Alonso con todo esto?
La protagonista tendrá que luchar no solo contra sus enemigos reales y físicos, también contra sus propios sentimientos y fantasmas del pasado, en concreto contra el recuerdo de Alonso. A través de los continuos flashbacks en la narración, vamos conociendo la historia de amor de los dos protagonistas y también conoceremos el viaje que ha hecho la cabeza de Diana hasta llegar a la capital inglesa.
'La cabeza de Diana' es una historia trepidante, llena de acción pero al mismo tiempo es una narración cargada de poesía en sus descripciones. Francisco M. Granado ha conseguido crear una novela diferente y sorprendente tanto por el argumento como por la forma en la que se nos cuenta. Sorprende ver como una novela que prácticamente es un thriller, está narrada con tanta musicalidad y belleza en el lenguaje, algo poco común en los libros de este género. Pero no puedo decir que 'La cabeza de Diana' es solo una novela policiaca. Es un libro que tiene amor, acción, datos históricos... Es difícil enmarcar esta historia en un solo género y creo que eso es muy positivo para el ritmo de la trama y para el lector.
Si me tengo que quedar con algo es con el personaje de Emma Wells. Me ha gustado mucho porque toma la decisión de salir a buscar su pasado para zanjarlo o para enfrentarse a él y buscar un nuevo futuro. Pese a ser una esposa y madre responsable, decide vivir su aventura ya que puede ser la última oportunidad de mirar a Alonso Bando a la cara. Choca su carácter responsable con su parte más guerrera, la que busca más acción y la que no se amilana ante el villano Dorian. Es una mujer inglesa de los pies a la cabeza y en ocasiones parece que se va a poner a tomar el té aunque las bombas exploten, aunque el Barón la persiga. Me ha gustado mucho también la relación que tiene con el capitán Laredo (otro de los grandes personajes), en un tira y afloja constante y que al final sorprenderá.
Y es precisamente ese final el que nos dejará con la boca abierta porque las últimas veinte páginas de 'La cabeza de Diana' no nos dan tregua ni respiro y evoca, en cierta manera, el final de 'Casablanca', esa película que siempre será eterna. En definitiva, 'La cabeza de Diana' es una historia más que recomendable para los amantes de las buenas novelas de policías, para los amantes de las novelas enmarcadas en la II Guerra Mundial y para los amantes de la buena literatura en general. 9/10.