La cabra

Por Equipajesdemano @auroracgalisteo
Los que quieran disfrutarlo ahora, tendrán que hacerlo en esta semana, porque La Cabra cierra sus puertas en el mes de agosto, tanto por descanso del personal como para volver en septiembre con las pilas cargadas y repletos de nuevas ideas para desarrollar en el día a día, como música en directo o coctelería. Y es que sin duda este local, a medio camino entre la glorieta de Alonso Martínez y la de Bilbao, es la apuesta segura de la nueva temporada.

Este multiespacio lo tiene TODO. Su amplísimo local se encuentra dividido en la tapería, nada más entrar, con varias mesas altas y bancas para un tapeo más informal; el espacio gastronómico, para disfrutar a mesa y mantel de su carta diferente; la biblioteca, con unos sofás y sillones que invitan a pasar toda la tarde con una revista o buen libro acompañado de copa o café; y la zona que mas me gustó: su bodega. Un lugar increíble para una celebración especial y original, rodeado de los nichos que contienen las innumerables referencias de caldos que poseen, con posibilidad de ser alquilados por sus clientes para tener su propia bodega en la temperatura y con los cuidados imprescindibles. Además, éstos podrán elegir entre llevar a casa o tomar en el local, pagando únicamente el descorche. Y por último, otra zona de reservados, con capacidad para 60 personas y con paneles que permiten distribuir el espacio y adaptarlo al número de comensales. 
La decoración de las diferentes áreas viene de la mano de Sol Villamor, responsable de la calidez y armonía que La Cabra transmite, optando por colores crema y pasteles que aporten luminosidad.

La Cabra es la creación del chef Javier Aranda, que tras formarse y moldear su estilo en lugares como Santceloni, El Bohío o Piñera, y recibir el segundo premio como mejor cocinero revelación en Madrid Fusión 2012, ha llevado su sueño a este rinconcito de Chamberí. Se apoya en un equipo joven y de confianza, con Iván Castro Feranade en cocina y Javier Usarrando como sumiller.
Javier ha querido ofrecer en su local el equilibrio perfecto a través de una cocina de mercado con toque de creatividad e innovación, para conseguir una fusión de sabores y texturas sorprendentes, con la calidad de la materia prima por delante. Adaptan su carta a la temporada, y tal y como me comentó, a la vuelta de verano tienen pensado darle un papel importante a los platos de caza, tanto pelo como pluma, ofrecer tres pucheros diarios y apostar por la combinación tierra-mar.
La carta de la tapería es distinta de la del gastro. Nosotros disfrutamos de la primera y sin lugar a dudas la otra opción queda pendiente, para disfrutar de platos como el calamar de potera relleno de manitas de cerdo o el cochinillo. Después de dos aperitivos, nos sorprendieron con unas vieiras, habitas y mantequilla blanca al anís, tomates pera rellenos de burrata, raviolis con yema de huevo, y su excelente carrillera, que tuvimos que pedir por partida doble. Y por supuesto todo ello con una presentación sobresaliente.

Para culminar, su jugosa torrija acompañada de helado es altamente recomendable, pero sin dejar atrás el coulant de chocolate o los helados de sabores como leche quemada o chocolate blanco. Un placer para los cinco sentidos.
El precio medio de la tapería ronda los 25-30€ y el del gastro en torno a los 45€, con posibilidad de menú diario a 13,5€ además de su menú degustación.

La Cabra comienza la mañana sirviendo desayunos y permanece en horario continuado hasta las 2 am, pudiendo concluir el día con un cóctel en su biblioteca. Además todos los martes organizan catas de vinos para grupos reducidos al módico precio de 20€, que incluye seis degustaciones y algún picoteo de parte de la casa.
Sin lugar a dudas, un espacio que se adapta a todas las necesidades y horarios y que va a pisar fuerte a la vuelta de las vacaciones, asegurándose un hueco en la oferta gastrónomica de la capital. No seas el último en probarlo.
¡FELIZ SEMANA!
La Cabra
C/ Francisco de Rojas, 2
zona Chamberí
Madrid
914457750
http://www.restaurantelacabra.com/