-Otro producto de su época, lugar y circunstancias.-
Lo que nos cuenta. El autor busca, dos años después de los acontecimientos que desea conocer más en profundidad, testimonios sobre la Octava División de Guardias del general Panfílov que protagonizaron la defensa del acceso a Moscú cerca de la carretera de Volokolamsk frente al ataque alemán durante la Segunda Guerra Mundial. La novela nos presenta el testimonio de uno de los protagonistas, el oficial kazako Baurdzhán Momish-Ulí.
Mi opinión. Trabajo de formas realmente agradables desde el punto de vista técnico y con mucho ritmo narrativo, pero contenidos pasados por el tamiz político, que seguro influyó en el autor, en los que soldados soviéticos comprenden toda penuria en nombre de la sagrada patria, se sacrifican voluntariamente en todos los casos y sus oficiales son sus amables tutores que les acompañan de la mano todo el camino, los soldados alemanes poco más que bestias salvajes, etc, etc, etc… En resumen, una curiosidad de interés literario relativo pero muy ilustrativa desde lo político cuando se escribió.
Destacado. Su grado de subjetividad, calificable de intenso como mínimo.
Potenciales Evocados. Como “Cherniakovski: el generalT-34”, digno fruto de su tiempo; se parece a “La cruz de hierro” (de la que no tardaremos en hablar aquí) como un huevo a una castaña.