Marina es una joven universitaria que, tras una caída, aparece de repente en una nueva realidad, una especie de reflejo oscuro de la nuestra, donde a los pocos seres humanos que encuentra sólo les preocupa sobrevivir a unas extrañas criaturas caníbales. Mientras lucha por sobrevivir, Marina hará sorprendentes descubrimientos sobre su extraño nuevo mundo y sobre ella misma.
Marina ha suspendido el curso. Sí, ya se le ha fastidiado el verano. Mientras sus padres disfrutan de unas vacaciones como es debido, ella se queda en casa, en la ciudad, estudiando. Sin embargo, sus apasionantes planes se tuercen: cae de la terraza a la casa del torreón, esa que ve desde su ventana y a la que nunca ha podido encontrar desde la calle. Cuando despierta, está en otro lugar. Mucho más oscuro, más lúgubre y más… peligroso.
Este libro tiene como tema principal el terror. Y sí, da un poco de yuyú. No miedo, pero Isabel del Río ha logrado crear muy bien una atmósfera gótica y muy atrayente que hace que quieras leer ese capítulo (como os he dicho arriba). Y aunque no ha terminado de cuajar en mí esa forma de escribir que tiene la autora, es decir, frases cortas, sí que me ha gustado el mundo ese que parece tan sencillo pero que en el fondo es tan complejo. Si la novela destaca por algo es por la ambientación, eso está claro: ya no solo el mundo que ha creado Isabel, sino que los dibujos, la edición, y los ornamentos que hay en cada página son de lo más escalofriante. Si el argumento no te hace sentir temblores (como fue mi caso xD) los dibujos lo harán. Palabrita de salamandra.
Y ahora llegamos al tema. EL TEMA. El final. Mucho se ha dicho de este final: malo, bueno, raro, estúpido, salida… ¿Mi opinión? La verdad es que tengo que levantarme y darle un aplauso a Isabel. Sí, puede que sea una salida un tanto teatral para terminar el libro, que se estaba poniendo peliagudo, pero yo no lo veo así. Yo más bien lo vi como un “apaga y vámonos” que le quedó perfecto. Y mirad que pocas veces digo esto… pero es que buf, puf, jia. Cerrado (muchísimo) y que acaba con todas las dudas que se nos podían ocurrir acerca del libro. ¿Es real todo esto o no? ¿Se ha fumado algo Marina? ¿Qué sucede en realidad? ¿Y qué sucede en realidad? Pues no lo sabréis hasta que leáis las últimas y gloriciosas páginas de este libro.