La cocina nikkei con más rock & roll de Madrid se come en el restaurante Latigazo
La gastronomía fusión japo-peruana, también conocida como cocina Nikkei, es una de las combinaciones culinarias más emocionantes y sabrosas que han llegado a España en los últimos años. Su éxito radica en la perfecta combinación de técnicas e ingredientes de ambas culturas, creando una experiencia cuyo objetivo es agitar el sabor. Y en el restaurante Latigazo lo hacen, como no podía ser de otra forma, a base de latigazos. Latigazos de sabor, ¡no te asustes!
Y es que este restaurante es un golpe al paladar, una chispa de sabor, una explosión de intensidad donde los ingredientes guardan un armonioso equilibro para que nada te deje indiferente.
Sus sabores audaces, la combinación de ingredientes frescos y la creatividad que se plasma en cada plato, convierte el paso por este restaurante en una experiencia sensorial completa.
El artífice de la gesta gustativa es el chef de origen peruano Jorge Rodriguez, quien a base de técnica, calidad y creatividad ha creado una carta destinada a conquistar (y satisfacer) cada uno de los sentidos. Y lo hace en una reñida plaza, Chueca, donde conviven suculentas comidas y exigentes viajeros llegados de todo el mundo, acostumbrados a sabores excitantes.
Tradición y vanguardia
Formado en los fogones de los hoteles de cinco estrellas más prestigiosos de su Perú natal, como el Raddison Lima, Hilton, Wyndham o Thunderbird, su acercamiento a la cocina peruana le viene casi desde niño.
Primero cultivando algunos de los ingredientes que imprimen el sello de la gastronomía peruana y después, aprendiendo la base de la cocina en el restaurante familiar. Allí aprendió de técnica, de tradición, del respeto por el producto, de calidad. Valores que ahora traslada a la cocina de Latigazo, a los que les imprime su sello personal y vanguardista.
Las manos de Rodríguez se mueven con gran destreza y sutileza ante la vista del comensal. La cocina vista permite no solo disfrutar de la pulcritud de su técnica, sino también, aprender de mezclas imposibles, aunque sumamente cautivadoras.
Fusión creativa en cada bocado
La variedad es marca de la casa y por su carta desfilan casi una treintena de platos que fusionan lo mejor de ambas culturas. Entre los entrantes encontramos el sabor exclusivo de las ostras kuro, elaboradas con leche de tigre, aceite de ají limo, cilantro e ikura; o las zamburiñas a la robata con leche de tigre, ají amarillo, miso y perejil.
Una de las estrellas indiscutibles de la cocina japo-peruana es el famoso ceviche. El chef incluye tres propuestas en su carta -el ceviche Limeño, Kiro y Tsurai-, todas ellas elaboradas con corvina fresca marinada con distintos ingredientes mezclados con extraordinaria maestría.
Otros platos emblemáticos de la cocina nikkei son los famosos Rolls o makis peruanos y los niguiris. Otro ejemplo magistral de audacia y equilibrio en el uso de ingredientes, que resulta sorprendentes no solo en boca, sino también a nivel visual. Si no puedes probar más de uno, te recomendamos que optes por los Rolls Makimono, a base de arroz suchi, solomillo, langostino furai, alga nori, aguacate, chimichurri, anticuchera, mayonesa de ají amarillo, sésamo, chalaquita y rocoto. Lo sabemos, la lista es infinita, pero haznos caso, el resultado es asombroso.
La carta se completa con algunos platos de carne como la entraña con salsa anticuchera, el Kaen (solomillo de ternera con shitakes y pack choy al wok), o el Gohan Nikkei (cerdito crocante con arroz jazmín, berenjena china y tirabeques al wok). En todos, encontrarás una gran habilidad que consiguen un juego de texturas fascinante.
Postres y cócteles de autor
Si después de esta experiencia creativa aún tienes hueco para los postres, elegir no te resultará difícil porque la carta solo cuenta con dos: el Bizcocho de vainilla con mezcla de leches aromatizadas con naranja, chantillí, helado de coco y flores comestibles; y la Esfera de chocolate con crema de yusu y maracuyá, crumble de quinoa y polvo de oro.
No te puedes ir de aquí sin probar algunos de sus cócteles de manos del bartender Francesco Azabache. Entre sus propuestas encontrarás algunos clásicos como el cóctel más famoso de Perú, el Piscosour, al que se suman otros cócteles de autor frutales y refrescantes, ideales tanto para acompañar la comida como para poner el broche de oro a una cocina vibrante, creativa y llena de matices.
Restaurante Latigazo
Dónde: C/ Infantas 28, Madrid
Reservas: Email: reservas@latigazo.world y Tlf. 915 473 028 / 676 471 162
Precio: entre 50 y 70 euros