La colaboración es el quid de la cuestión

Publicado el 05 noviembre 2013 por Davidsoler @dsoler

Hace una semana hablaba de cómo qué eran los medios sociales al marketing y comentaba que no solo podíamos hacer marketing en ellos. La verdad es que lo que más me gusta e interesa de todo lo que pasa en Internet gracias a la web 2.0 es lo que no tiene que ver con el marketing (aunque sea a lo que me dedico profesionalmente).

Lo mejor de Internet es la capacidad que nos ha abierto a todos para colaborar y compartir. De esa capacidad es de donde ha surgido todo. Sin la posibilidad de compartir no tendría mucho sentido el marketing en medios sociales, por ejemplo. Y eso lo conseguimos hacer hoy en las redes sociales y eso, además, ha despertado la necesidad de las personas por colaborar con otras personas para desarrollar ideas, proyectos, documentos…. Hoy, a poco que estés algo metido en el uso de herramientas colaborativas, y que tengas verdadero interés en todo ello, te habrás dado cuenta que inviertes tiempo y dinero en cosas que no hacías hace apenas 5 años. De verdad que lo siento mucho por todos los que no viven esta auténtica revolución porque no saben lo que alimenta el alma.

Y esta posibilidad, que aún no sé si fue antes que la necesidad de la gente por colaborar, es la que ha permitido que surjan nuevos modelos de negocio. De entre todos los que más me interesan son los relacionados con la economía colaborativa. La economía colaborativa permite desarrollar proyectos no solo a emprendedores o nuevas líneas de negocio a empresas con cierto solidez, sino que ya hay empresas de las grandes que están tratando de desarrollar productos y servicios con sus clientes y stakeholders en general (el ejemplo más fácil es el de DELL o el de Nike y Munich con sus zapatillas deportivas).

Este nuevo escenario de colaboración debe permitir no solo crear nuevos productos más ajustados a las necesidades de los consumidores sino que pone, por primera vez y de verdad, al consumidor por encima del producto y cualquier otra estrategia de marketing. Y uniéndolo con el marketing ¿qué hay mejor que una estrategia de marketing que se basa en lo que crean, hacen y quieren las personas?

Esta necesidad (y ganas) de las personas por compartir y colaborar es lo que muchas empresas deberían entender e incorporar a sus procesos. Eso no sólo ayudaría a generar más engagement y, en el fondo, hacer marketing, sino que desarrollarían mejor sus propuestas, a un coste quizás menor y generarían nuevas formas de crear valor. Las personas queremos participar de todo este nuevo proceso. Cambiamos los hábitos de consumo no solo por una cuestión de dinero (sacar los tickets de avión en una web o alquilar un apartamento vía Airbnb) sino porque nos gusta hacerlo. Ya no hablemos de colaborar económicamente en un proyecto o usar un banco de tiempo.

Todas estas cosas sí le están dando la vuelta a la economía tal y como la hemos vivido siempre. No sé cuanto tardaremos en que se implante del todo o si algún día se implantará pero sí tengo claro que el simple proceso de que la economía colaborativa sea algo normal en la vida de las personas, “obligará” a las empresas a ser más transparentes, más socialmente responsables y eso, sin duda, redundará en mejoras para toda la sociedad.

La Economía colaborativa será el leit-motiv de #AERCOmparte III que celebraremos en Barcelona el próximo día 27 de noviembre. Resérvate el día porque será muy interesante. En unos días os daremos todos los detalles.

¡Que tengáis una feliz semana!

Imagen extraída del post Economía Colaborativa en EmprendelandiaBlog