En una ceremonia en el Salón de las Mujeres, Cristina interactuó con los chicos que comenzaron su show con una canción de ritmo típicamente cubano y luego les pidió que interpreten “Óleo de Mujer con Sombrero” de Silvio Rodríguez, a la que calificó como una de sus preferidas.
Acto seguido, cantó con los niños “La Maza” y “Ojalá”, otras dos famosas canciones del trovador cubano, y agradeció al ex presidente Fidel Castro el regalo que envió días atrás para el nieto de la mandataria, Néstor Iván.
Con posterioridad La Colmenita se despedía del público argentino con la aclamada pieza musical para adultos "Y sin embargo se mueve".
Antes de la última interpretación, Carlos Alberto Cremata, director de la agrupación declarada por Unicef como Embajadora de Buena Voluntad, explicó que a través de La Colmenita del Sur, creada en Buenos Aires con niños argentinos, se ha extendido este proyecto socio-cultural a otras seis localidades de este país.
La obra "Y sin embargo se mueve" es una apuesta a creer en los sueños y a defender la verdad por encima de cualquier obstáculo, y su magistral interpretación por los niños actores y músicos hizo brotar lágrimas en los ojos de no pocos de quienes acudieron al Cervantes.