¿Y por qué de todo esto? Nuestro cerebro se compone de tres partes: el primitivo, que reacciona de una forma casi automática, dónde la supervivencia es lo más importante (peligro, sexo y comida), el medio, responsable del proceso de emociones y que afectan a nuestro raciocinio, y por último, el nuevo, que es el que se encarga de procesar el lenguaje, de hablar, de pensar,... el racional. Pero en numerosas ocasiones son el primitivo y el medio los que toman de una manera no consciente, la mayoría de las decisiones.
Aquella página web que sea capaz de hablar a los tres cerebros será aquella que consiga conversiones. ¿Y cómo lo conseguimos?
- mostrando votaciones y dejar recomendaciones de otros lectores;
- construyendo reciprocidad a través de regalos;
- utilizando la ilusión de la escasez;
- limitando las opciones disponibles;
- utilizando la inmediatez como arma de seducción;
- poniendo la acción más importante en primer lugar;
- hablando directamente con el cliente y poniéndolo en primer lugar;
- consiguiendo su compromiso;
- utilizando la supervivencia como moneda de cambio: peligro, sexo y comida;
- utilizando el miedo a perder;
- usando imágenes atractivas y similares a nuestros clientes objetivo;
- y... siendo un contador de historias.
¿Creéis que todo esto es una manera de manipular al usuario?. ¿Por qué no lo debatimos en el próximo Monday Reading Club? Debatamos.