El trabajo de toda la semana acostumbra a verse reflejado en el partido, este será la herramienta más importante del que disponemos para evaluar si nuestros jugadores asimilan todos aquellos conceptos trabajados. La comunicación dentro del terreno de juego durante entrenamientos y partidos será un elemento clave para conseguir los objetivos marcados. Hoy me centraré en aquella que se produce entre el entrenador y los jugadores. ENTRENAMIENTOS El técnico, como máximo responsable del grupo, debe tener una comunicación directa con los jugadores. Durante la semana es el responsable de introducir objetivos, tareas para realizar o informar de los errores cometidos durante la competición preparando de esta forma mentalmente a los protagonistas para los entrenamientos que deberán realizar. El inicio de la sesión es el momento oportuno para resumir los ejercicios que deberán hacer y las razones; de esta forma, los futbolistas ya conocerán el contenido de la sesión permitiéndonos optimizar tiempo. Es importante saber que la concentración de estos en el momento que se encuentran en el terreno de juego es muy pequeña tendiendo a distraerse con facilidad, por lo que un discurso largo no les ayudará en absoluto. Una vez da inicio la sesión deberemos utilizar las pausas entre ejercicios o series para corregir todos aquellos detalles que creemos que son importantes. La intensidad debe estar presente durante la sesión y el hecho de parar el ejercicio constantemente no ayudará a los futbolistas a conseguirla, además de afectar de manera considerable el tiempo para entrenar del que dispondrán. A la finalización del entrenamiento, una nueva charla con ellos durante los estiramientos o la recogida del material puede ser suficiente para valorar si han sido capaces de alcanzar los objetivos planteados en el inicio.
El trabajo de toda la semana acostumbra a verse reflejado en el partido, este será la herramienta más importante del que disponemos para evaluar si nuestros jugadores asimilan todos aquellos conceptos trabajados. La comunicación dentro del terreno de juego durante entrenamientos y partidos será un elemento clave para conseguir los objetivos marcados. Hoy me centraré en aquella que se produce entre el entrenador y los jugadores. ENTRENAMIENTOS El técnico, como máximo responsable del grupo, debe tener una comunicación directa con los jugadores. Durante la semana es el responsable de introducir objetivos, tareas para realizar o informar de los errores cometidos durante la competición preparando de esta forma mentalmente a los protagonistas para los entrenamientos que deberán realizar. El inicio de la sesión es el momento oportuno para resumir los ejercicios que deberán hacer y las razones; de esta forma, los futbolistas ya conocerán el contenido de la sesión permitiéndonos optimizar tiempo. Es importante saber que la concentración de estos en el momento que se encuentran en el terreno de juego es muy pequeña tendiendo a distraerse con facilidad, por lo que un discurso largo no les ayudará en absoluto. Una vez da inicio la sesión deberemos utilizar las pausas entre ejercicios o series para corregir todos aquellos detalles que creemos que son importantes. La intensidad debe estar presente durante la sesión y el hecho de parar el ejercicio constantemente no ayudará a los futbolistas a conseguirla, además de afectar de manera considerable el tiempo para entrenar del que dispondrán. A la finalización del entrenamiento, una nueva charla con ellos durante los estiramientos o la recogida del material puede ser suficiente para valorar si han sido capaces de alcanzar los objetivos planteados en el inicio.