Que es la congestión nasal en niños.
Vulgarmente creemos que la congestión es simplemente una gran acumulación de mocos en la nariz del niño, aunque no es el motivo por el cual les cueste respirar y expulsen más mocos de lo normal.
Debemos diferenciar entre la secreción y la congestión nasal:
Secreción nasal: Nos referimos a un constante salida de mocos en estado líquido de la nariz del bebé o del niño. La función principal de la secreción nasal es eliminar posibles virus y bacterias que podrían entrar por la nariz. En este caso lo único que debemos hacer es mantener la limpieza extrayéndole los mocos, si el niño es más mayor podemos usar un pañuelo, pero cuando aun no saben sonarse, lo ideal es usar el aspirador nasal o sacamocos. En algunos casos la secreción suele ser provocada por algún tipo de alergia, en cuyo caso podemos suministrarle algún antiestamínico que nos recete el alergólogo.
Congestión nasal: En la congestión nasal no tiene que haber mocos líquidos y con un flujo constante, sino que se limita a una obstrucción de las vías o de una solamente, impidiendo respirar correctamente al niño, el suero fisiológico puede ser de mucha ayuda a la hora de limpiar la nariz.
Cuáles son las causas de la congestión en niños.
Los motivos de la congestión pueden ser varios, aunque el más común se produce cuando las fosas nasales experimentan una hinchazón, estrechando así los conductos.
Esta inflamación puede producirse por diferentes motivos, aunque lo más común es que sean los vasos sanguíneos los que aumenten su tamaño por un exceso de sangre.
Hay muchos motivos por los que se produce la congestión, los más comunes son por medio de una bacteria o virus:
- Por un catarro.
- Por una gripe.
- Por una infección en las fosas nasales.
Otras causas diferentes de la congestión nasal son:
- Por una rinitis alérgica o no alérgica.
- Alérgias.
Los niños congestionados.
Aunque los motivos por los que se sufre congestión son los mismos para bebés y adultos, no es lo mismo en unos que en otros. Debemos tener en cuenta que los bebés recién nacidos respiran por la nariz de una forma natural, y la costumbre de respirar por la boca, lo vamos cogiendo con la edad.
Por lo que les va a suponer un esfuerzo mucho mayor a la hora de las comidas, ya que le faltará el aire, por eso debemos tener más paciencia a la hora de dar de comer al bebé cuando esta congestionado.