Un apasionante juicio, donde James McAvoy como abogado, y un sin fin de actores de calidad, tendrá sus prejuicios contra Mary. Algo que con los acontencimientos se irá tornando en descubrir los entresijos de la historia. Elementos certeros deleitan en casi dos horas de buen juicio, a pesar de unos primeros minutos titubeantes de film. Es un sólido drama político, con demasiados mensajes entrelíneas, que probablemente no encaje bien con la taquilla española. Os dejo, como siempre, una breve sinopsis:
"En 1865, ocho sospechosos del asesinato del Presidente Abraham Lincoln, que se ocultaban en casa de una mujer, fueron detenidos. Sin embargo, hay alguien que cree en su inocencia e intentará desenmascarar al verdadero culpable: el hijo de la mujer". (filmaffinity.com)