Los número no cuadran y ya hay varias publicaciones que se hacen eco de que muy probablemente no veamos Scream 5 hasta dentro de mucho tiempo; éso si finalmente no se reinicia la saga, algo que sería una nefasta elección, teniendo en cuenta la temática y el estilo narrativo y argumental de Scream (precisamente en la cuarta parte se criticaba mordazmente, y con razón, los remakes y reinicios de las películas en el cine actual).
En un primer momento, según palabras de Kevin Williamson (guionista de la primera, segunda y cuarta entrega), Scream 4 era el inicio de una nueva trilogía, que continuaría argumentalmente con las bases expuestas por ésta, para continuar y cerrar el círculo con las partes 5 y 6. Igualmente, Wes Craven había afirmado recientemente que si el guión era bueno él estaba dispuesto a rodar las dos siguientes continuaciones, pero que todo dependía de la recaudación en taquilla. Incluso los propios productores estaban convencidos de que Scream 4 iba a ser un taquillazo y decidieron hacerla más terrorífica con más dinero para volver a rodar escenas.
Pero la nueva audiencia no ha perdonado que hayan pasado diez años desde la parte 3 hasta la 4, a pesar de que Scream 4 se ha adaptado perfectamente a los nuevos tiempos y ha mantenido ese estilo tan característico de cine de finales de los noventa que tan famosa hizo a la saga. La nueva generación consume otro tipo de cine, el de secuelas cada año, con argumentos inexistentes, muchas explosiones, espectacularidad, gore y sangre sin guión; ya no les interesa pensar en quién puede ser el asesino ni si sus motivos son lícitos o no, quieren entretenimiento sin esfuerzo. Básicamente lo que exponía y subrayaba Scream 4: la generación que lo tiene todo hecho y traga sin digerir lo que ve.
Es muy probable que parte de la culpa de la poca recaudación la haya tenido Scream 3, ésta tenía unos precedentes muy buenos y muchos seguidores salieron realmente decepcionados del fracaso argumental que supuso la tercera parte. Éso justificaría que actualmente muchos hayan decidido no volver a ver una continuación de las aventuras de Ghostface por miedo (y no del cinematográfico) a encontrarse con otra estúpida continuación como fue la parte 3. Además, hay que sumar que la generación que hace diez años acudía en masa a los cines ahora prefiere verlo en casa, en pantalla grande y sin gastar tanto dinero en las entradas, lo cual abre la posibilidad de que Scream 4 probablemente recupere parte de su inversión en el mercado doméstico.
Si finalmente asistimos a un reinicio de la saga Scream, será una muestra más de la triste realidad que vivimos en la que prima más una abultada taquilla que una película con personalidad y coherencia, y se sumaría así a la continua y creciente fiebre (provocada por la escasez de ideas originales) de los reinicios y remakes que pueblan (y lo harán a nivel industrial próximamente) las carteleras. Sin embargo, las secuelas no están del todo muertas: A todo gas ya va por la quinta parte (y la seis en camino), Saw puede volver con la parte 8, y se están preparando las continuaciones 5 de La jungla de cristal y Terminator... pero, de momento, Scream no seguirá adelante hasta nuevo aviso.
Fuentes: moviehole / E!onlineMuchas más noticias en No es cine todo lo que reluce.