Gracias a Carlos Gallego de Cinemascomics, a y los cines Palafox de Zaragoza, pude asistir al maratón de La cosa. En este maratón, se proyectaba la película de John Carpenter de 1982, y se preestrenaba la nueva precuela.
Lo primero que puedo decir, es que si te decides a ver esta nueva película de La cosa, lo mejor es que no hayas visto hace poco la de John Capenter, pues las similitudes, disfrazadas de homenajes y detalles que la unen a su supuesta secuela, son muchas, incluso excesivas, lo que hace que no disfrutes con toda plenitud de una película que es bastante entretenida, aunque ha perdido mucha originalidad por emular a su predecesora de 1982.
Dirigida por el debutante Matthijs van Heijningen Jr., la película nos situa lógicamente antes de todo lo ocurrido en la película de John Carpenter, es decir, nos cuenta que les paso al campamento Noruego, donde el grupo de científicos que allí esta trabajando, hacen un descubrimiento bajo muchas toneladas de capas de hielo, de una forma de vida alienígena, junto a su nave. Este descubrimiento, y el querer tener la exclusiva sobre él, hacen que a prisa y corriendo, se busque a una paleontóloga (Mary Elizabeth Winstead), y se proceda al análisis del cuerpo y de la nave. Este descubrimiento, les va a plantear muchos problemas, pues la forma de vida, vuelve a la vida, y quiere hacerse con el control del campamento, y poder llegar al resto de la civilización para poder contagiar al resto del planeta, pues es una forma de vida, que se reproduce como un virus.
La película va encajando todas las piezas que se nos mostraron en la película de 1982, incluso hasta el mínimo detalle, como puede ser un hacha clavada en una pared. Una lástima, se reproduzca casi al completo, la estructura y las escenas de la película de Carpenter. Se llega incluso a recrear la prueba para saber quién es humano, aunque esta vez, no es tan "científica", y puede entrañar más que alguna duda para poder demostrar realmente si eres humano o no. Desde luego, el bicho, o la cosa, esta vez adquiere mayor presencia, gracias a los avances de la técnica, aunque yo hecho de menos los añorados efectos especiales de los 80. El diseño de la criatura, por lo tanto, es más minucioso, y plantea nuevas formas para este bicho (como las manos, lo entenderéis cuando la veáis).
El trabajo de los actores, es perfecto, donde casi todos desconocidos para mi, salvo Mary Elizabeth Winstead, y Ulrich Thomsed, se creen mucho su papel, y se lo toman muy en serio, para poder brindarnos una excelente interpretación. Podemos destacar a los siguientes nombres: Eric Christian Olsen, Joel Edgerton, Ulrich Thomsen, Jonathan Walker,Dennis Storhøi, Kim Bubbs, Stig Henrik Hoff.
En definitiva, una película que recomiendo, porque es entretenida,y es un lujo, poder ver de nuevo la historia de Carpenter que ya adaptaba el mismo libro que la de de 1951 (El enigma de otro mundo), y ver como se van encajando las piezas para unirla a la de 1982. Y si la ves y te olvidas un poco de la de Carpenter, sin duda aún la disfrutaras más, aunque no llegue a la calidad de la primera, por lo menos gana algo de originalidad, sin tener el precedente de Carpenter.