Criar con cariño.
Todo cambia, incluso la forma que tenemos de relacionarnos entre nosotros. No hay más que ver una película basada en otras épocas, para darnos cuenta de el gran número de cambios que han sufrido las relaciones de padres e hijos. Por suerte, ya quedo muy atrás, la frase que inspiro a todos los colegios durante muchos años: “La letra con sangre entra”. Cada vez es más la información que recibimos de la ciencia. Y conocemos mucho mejor el funcionamiento de los cerebros y los diferentes comportamientos no solo de los niños, sino también de los adultos. Algo básico para poder ser coherente y conseguir un mejor resultado en la educación y crianza de los niños.
En muy poco tiempo hemos pasado de enseñar con la zapatilla, a la tolerancia total. Algo
Cariño:
1. Inclinación de amor o buen afecto que se siente hacia alguien o algo.
2. Manifestación de dicho sentimiento.
Yo me quedo, con que el cariño, es la muestra de afecto que se da entre los seres vivos. Lo mejor es que los niños son entrañables, con lo que incluso las personas más ariscas, instintivamente van a sentir la necesidad de arropar a su bebé.
Necesidades de los niños.
Los niños tienen muchas necesidades en los primeros años de vida. Desde ser alimentados, que se cuide su higiene, que se les haga caso y por supuesto necesitan sentirse queridos entre muchas otras.
El cariño, es una de las formas que tenemos para demostrar a alguien que le queremos o que le necesitamos. Durante los primeros 3 años de vida, los niños deben crearse la imagen de ellos mismos. Algo fundamental, que influirá en todo lo que haga el niño en un futuro. El sentirse querido y apoyado, es lo mejor que le puede pasar a cualquier niño. Ya que reforzará su autoestima y le procurará una tranquilidad pasmosa, ya que sabe que puede contar con alguien que no le va a fallar nunca. Aunque no hay ni un solo día en el que el niño no deba tener una muestra de afecto. Incluso cuando se ha portado mal.
¿Cuanto cariño es suficiente para el niño?
Es una pregunta curiosa. Ya que no tiene una respuesta. Depende de dos cosas, el carácter del niño y el de los padres. En mis más de 15 años trabajando con niños, he visto niños de todo tipo. y hay muchos niños que no les gusta que seamos tan cariñosos. Les gusta ir más a su aire. Y tan solo querrán que le aportemos cariño cuando ellos quieren y por algún motivo. Sino incluso se enfadarán. Con lo que debemos fijarnos más en el carácter y la actitud del niño para hacer las cosas.
Hay algo que siempre digo a los padres que creo que es la clave para criar a un niño. Independientemente como sea el niño. Nuestro principal objetivo, es hacerle sentir, que pase lo que pase, va a tenernos ahí siempre. Es justo la tranquilidad que necesitan los niños para desarrollarse de una forma saludable. Y aprovecha a darle todas las caricias, abrazos y besos que puedas. ya que en un futuro no muy lejano, ya no podrás y lo echaras de menos.
¿Cariño es malcriar?
Siempre que hablamos de cariño a la hora de criar a un niño. Nos sale la palabra malcriar. Mucha gente opina que el exceso de cariño consiste en malcriar al niño. Nada más lejano de la realidad.
Pero para dejarlo claro, vamos a ver la definición de malcriar:
1. Educar mal a los hijos, condescendiendo demasiado con sus gustos y caprichos.
Como vemos el dar cariño no está incluido dentro de la definición de la palabra. Sino que va más dirigido a la educación, a la forma de encaminar la vida del niño. Pero evidentemente, son dos terminos que no tienen nada que ver. Lo que quiero decir que se puede dar cariño y malcriar al mismo tiempo y se puede no dar cariño y malcriar igualmente. El cariño es demostrar los sentimientos que tenemos hacia nuestro peque. y nunca estará demás que le demos un buen abrazo y un achuchón cariñoso.
¿Qué hay que hacer?
Utilizar la lógica. Muchas veces no nos damos cuenta de la sociedad y el mundo en que vivimos. Existe una utopia sobre la educación, en la que todo es de color de rosa. Con cariño lo solucionamos todo. Desgraciadamente no es así.
No olvidemos que somos sus padres, no sus amigos ni sus abuelos. Debemos darle todo el cariño que necesite y más. Pero, eso no quita, que además nuestra responsabilidad es que el niño sea consciente del mundo que le rodea, y le demos todas las herramientas necesarias para que pueda defenderse de todo lo que se va a encontrar. El exceso de protección o de consentimiento (que no cariño) son los caminos que más le pueden perjudicar al niño.
Yo creo que cuando la gente habla de malcriar, está hablando más de consentimiento que de cariño. El niño no puede salirse siempre con la suya por que si. Eso está muy lejos de dar cariño. Más adelante veremos en los limites en los niños, la importancia que tienen en el desarrollo de los bebés y los niños. Y por supuesto como no tiene nada que ver el ser cariñoso y exigente (en según que aspectos) al mismo tiempo.