La crísis como oportunidad para evolucionar

Por Lorraine C. Ladish

Mis hijas y el hijo de mi pareja

Hace un año compartí una lista de agradecimientos que en realidad escribí el año anterior, por estas fechas. Quería reconocer públicamente los gestos de cariño, empatía y ayuda de familia, amigos y conocidos.
Este año he podido escribir un post resumiendo todo lo que he conseguido a lo largo de los últimos tres años, y en especial cómo ha culminado todo mi esfuerzo el los meses más recientes. No se me olvida, ni quiero que se me olvide, que hace sólo dos navidades mis hijas recibieron regalos de navidad de una organización caritativa. Recuerdo echarme a llorar cuando dos voluntarias entraron en mi apartamento con dos bolsas enormes llenas de juguetes envueltos para mis nenas. Y cuando me dieron una tarjeta-regalo para comprar la cena de navidad, entendí lo que significa el que alguien te tienda una mano en los peores momentos. Es difícil haber tenido buena posición personal y profesional y perderlo todo. Y sé que muchas personas que lean esto pueden encontrarse en semejante encrucijada. ¿Cómo me mantuve a flote? Escribiendo, creyendo en mis habilidades, a veces llorando cuando mis hijas dormían, pero tenía (y sigo teniendo) ese hambre del que hablaba Steve Jobs … Esas ganas de aprender, de mejorar, y de ingeniármelas para salir adelante. Y lo conseguí.

En Miami, un día después de aceptar el puesto de editora

Hace unos días recibí un e mail de una amiga felicitándome por mi nuevo puesto de editora jefe en VOXXI Mujer. Era el primer e mail que me enviaba en un año, y me confesaba que su silencio se debía a su enfado porque yo no le había dedicado el tiempo y atención que una amiga merece. Me dolió, claro. Pensé que era imposible que ella me enviara semejante correo, si en realidad fuera consciente de que como madre, todos mis esfuerzos debían dirigirse a encontrar la manera de remontar profesionalmente y personalmente. Que realmente había pasado momentos de verdadera necesidad y que una amiga que se precie comprende que lo primero es sacar adelante a los hijos, como sea. En fin, no respondí al correo, y aunque mi lucha me haya hecho perder amigos en el camino, que quizá nunca lo fueron, me ha hecho ganar muchas más cosas: empatía, otros amigos más afines, perspectiva, fe, satisfacción, amor, el poder dormir por las noches, y disfrutar de mis hijas y de la vida. Este año, como hice el año pasado, yo donaré a la organización que me ayudó a mí. Y seguiré como reza el dicho: a Dios rogando y con el mazo dando. ¡Felices fiestas! Si te gusta este blog, sígueme en Facebook o Twitter Lorraine C. Ladish es autora de 17 libros, y una experta mamá latina. Desde Diciembre de 2011, es editora jefe de la sección VOXXI Mujer en www.voxxi.com