


Lord Poltimore abrió el debate con una intervención divertida y amena donde señaló cómo el interés del mercado chino ha disparado los precios de Van Gogh de 11M $ a 66M$. Advirtió de que el arte también se devalúa, y que las tendencias no siempre obedecen a criterios artísticos sino, a veces, a valores imposibles de controlar como mitomanías o arranques de pasión. Mauricio Álvarez de las Asturias afirmóal respecto que las galerías ejercen una gran influencia, en la decisión de compra, ya que "si la galería tiene confianza en el artista y asegura una revalorización de la obra, el cliente compra."En la mesa el resto de invitados destacaron el notable incremento en las ventas de vino de colección y de relojes, y que Catar, Emiratos Árabes, India, Kuwait y algunos estados africanos, se están incorporando al mercado del arte, no sólo como productores, sino como compradores.
Con el título Conectando con el consumidor de lujo a través del arte se celebró una segunda mesa, esta vez dirigida por Carlos Falcó, Marqués de Griñón y Presidente Ejecutivo del Círculo Fortuny,que contó con la participación del escultor y artista Arturo Berned, y de Rosa Lladró, presidenta de la firma homónima, que resaltó las alianzas con artistas heterogéneos de su firma: Desde Paul Smith hasta Pablo Serrano o Amadeo Gabino, para dotar a sus obras de amplitud de estilos desde clásico a modernos.Al respecto, Berned animó a los artistas a avanzar en nuevos estilos y disciplinas, y añadió que, para él, "el valor de una pieza de arte tiene que ver con el sentimiento de quien la observa". Por su parte, Falcó mencionóque el 70% del mercado del lujo mundial proviene de firmas Europeas y es un motor de la economía", algo que vinculó con el hecho de que el continente en rico en “cultura, artesanía, creatividad, aura...”y en sus "raíces fenicias, romanas, nazaríes, románicas o góticas". Falcó recordó que la marca Europa representa “el 7% de la población mundial, el 24% del PIB global (por encima de Estados Unidos) y el 40% del gasto en bienestar del planeta”. Puntualizó que la marca España "no es inferior a nadie, pero le falta venderse me-jor y dar el salto de tiendecita a marca global", y animó a "salir más al extranjero".