La cultura del descarte

El Centro de Bioética Persona y Familia ha publicado recientemente un artículo, en el que se hace eco de nuevos estudios, que reflejan datos y tendencias preocupantes sobre el suicidio asistido y la eutanasia en Holanda y Bélgica.
Algunos datos interesantes:
En Holanda, de un total de 645 solicitudes recibidas, 162 fueron aprobadas y de estas últimas:

• 8% referían estar“cansados de vivir”;
• 7% solo hablaban de sufrimiento psicológico;
• 1% informaban de su sufrimiento como “soledad”;
• 7% de las personas tenían más de 80 años 

En Bélgica también se registraron tendencias preocupantes:

• En Flandes, la eutanasia pasó de representar el 1.9% de todas las causas de muerte en 2007, al 4.6% en 2013; y las solicitudes aprobadas, del 55% aumentaron al 77% -mismos años comparados-.
• A diferencia del 2007, para 2013 ya se podía esgrimir como causa de “cansancio de vivir”.
• Las poblaciones que más rápido están creciendo de los que reciben eutanasia: mujeres, mayores de 80 años, las personas de bajos niveles educativos, ancianos que viven en asilos.

Y siempre queda sin definir a qué se llama sufrimiento insoportable: es un concepto vago que resulta inquietante.