De nuevo miércoles y por aquí me paso yo a traeros una nueva reseña a mi rinconcito. En esta ocasión el libro lo pude leer gracias a Laky que organizó un sorteo express y una lectura conjunta con el mismo, y resulté una de las afortunadas en el primero: La cuna vacía de Sophie Hannah.
La cuna vacía es una novela diferente respecto a otras que he leído del mismo género, y a mí personalmente me ha llamado la atención por ello.
La novela tiene dos líneas argumentales bien diferenciadas. En una de ellas podremos asistir a través de Fliss a la investigación que la misma realiza para llevar a cabo un reportaje acerca de las mujeres que han sido supuestamente acusadas falsamente de infanticidio. Dicha línea argumental está narrada en primera persona por Fliss, una chica joven y un poco loca que le da el punto divertido a la novela. Por su parte, tendremos otra línea argumental en la que se investiga el asesinato de Helen, precisamente una de esas mujeres que fue acusada de infanticidio.Dicha línea nos será contada a través de un narrador omnisciente ajeno totalmente a la trama. Evidentemente no es necesario aclarar el que ambas líneas acaban por interrelacionarse irremediablemente.
Combinados con dichas líneas argumentales tendremos algunos capítulos intercalados a lo largo de la novela compuestos por noticias de períodicos que resultan relevantes para la trama, entrevistas que se hacen a personajes fundamentales en la historia, o fragmentos de un libro escrito también por alguno de los personajes claves.Precisamente esta combinación es lo que me ha resultado original y más me ha gustado de la novela, ya que ha hecho que pudiese analizar la historia desde muy diversos puntos de vista, ya que no es lo mismo observar en primera persona unos acontecimientos, que hacerlo desde el punto de vista de un tercero imparcial.
Desde mi punto de vista la parte más interesante es la dedicada a dilucidar si realmente Helen, Ray y otras mujeres acusadas por matar a niños han o no cometido tal delito. El asesinato, a pesar de ocupar una parte importante en la historia me ha resultado menos interesante. Quizá haya sido por el hecho de que he empatizado más con Fliss, que es la narradora en primera persona, que con los policías encargados de resolver el crimen que tiene lugar en la novela, los cuales son descritos por el narrador omnisciente que a pesar de retratarlos bastante bien no ha conseguido que sintiese nada especial respecto a ninguno de ellos (además es que son muchos los policías implicados en el caso).
Por lo que se refiere a la acción de la novela he de decir que no es tan rápida ni adictiva como otras del género. A pesar de que me ha resultado interesante y quisiese saber más acerca de la inocencia o no de las mujeres, y descubrir al asesino de la historia...no sentía esa ferviente obsesión con seguir leyendo como me ha pasado con otras novelas del género. Sin embargo, sí que me ha dado mucho que pensar debido al tema sobre el que gira la historia ¿cómo una madre es capaz de matar a su hijo? ¿a carne de su carne? En fin...supongo que hay de todo en la viña del Señor...pero de verdad que hay algunas cosas que nunca llegaré a entender a pesar de meditar acerca de ellas largo y tendido.
En conclusión, una novela original en cuanto a estructura se refiere, con un tema de fondo que nos hace reflexionar, y que a mí personalmente me ha entretenido de principio a fin. Si bien no es de las mejores novelas de este género que he leído sí que la he disfrutado y no descarto el adentrarme en otras novelas de la autora.
¡¡Muchos besos y hasta pronto!!Valoración: 3/5 Buena