Publicado por juanmarodriguezcoaching el 30 de enero de 2014 · Dejar un comentario
Muchas personas me comentan que tienen estrés, cuando les pregunto qué es lo que les provoca ese estrés, les cuesta responderme pues no tienen identificado las causas de eso que les estresa. Si decides hacer esta lista, puedo asegurarte que te estarás haciendo un buen regalo.
El estrés no es algo nuevo. Nos lleva acompañando desde siempre. Nuestros antepasados prehistóricos lo padecían cuando identificaban una situación de peligro.
Robert Hooke, físico del siglo xvii, usó por primera vez el término “stress” (tensión) en uno de sus estudios. Lo identificaba con el momento preciso en el que los metales sufrían una modificación física, mientras eran sometidos a estímulos intensos.
Hoy identificamos el estrés como la tensión, mantenida en el tiempo, que sufrimos ante una situación externa. La diferencia con el que vivían nuestros amigos prehistóricos es que ellos, una vez pasada la situación de peligro no experimentaban estrés. Nosotros, lo seguimos sufriendo aunque la situación de peligro ya no exista.
Imagina que en tu empresa se rumorea que se van a producir despidos. Pensar en un posible cambio de la situación laboral o despido, es una de las causas mayores para padecer estrés. Llega un día, en el que esos despidos son realizados y tú eres uno de los afortunados que sigue trabajando en la empresa. Lo normal es que el estrés desaparezca, sin embargo piensas que puede que vengan más despidos y eso te lleva a mantenerte en un estado constante de estrés.
El estrés está asociado a la emoción del miedo. Miedo al futuro, a lo que pueda pasar.
Identificar el fin de las situaciones de peligro, te ayudará a cerrar momentos de estrés. Mantenerlas todavía en mente y establecerte en posibles acciones futuras, te llevará a ser una persona con más opciones de padecer estrés.
¿Conoces a alguien que lleve tiempo viviendo en un estado de estrés? Hemos aceptado que vivir estresados es normal y no le damos importancia. Vivir en un estado de estrés mantenido en el tiempo puede provocar enfermedades graves e incluso la muerte. No dejes de recomendar a ese conocido que acuda a un especialista para que le ayude.
Supongo que llegado a este punto, ya has terminado tu lista de aquellas cosas que te producen estrés. Bien ahora te pido que en el papel dibujes tres columnas. A una la vas a llamar “las que están bajo mi control”; otra “las que puedo influir pero no depende de mí” y la tercera “las que me preocupan pero no puedo hacer nada”.
Una vez identificadas las columnas, ahora vas a ir colocando dentro de cada una de ellas, las situaciones que has identificado que te generan estrés.
Si has identificado que, por ejemplo, escuchar una noticia de un terremoto en Japón te genera estrés, colocarás esta situación bajo la columna “me preocupa pero no puedo hacer nada”.
Si postergar tareas en tu trabajo te genera estrés, la pondrás bajo la columna “las que están bajo mi control”
Una vez hecha la clasificación, podrás identificar qué situaciones no dependen de ti y preocuparte por ellas no tiene mucha lógica. Otras las habrás identificado como situaciones que puedes influir pero la decisión final no depende de ti ¿para qué estresarte entonces? Cuando se tome la decisión, actuarás. Las colocadas en la columna “las que están bajo mi control” son aquellas en las que deberás poner manos a la obra para irlas tachando de la lista. No te preocupes por ellas, mejor ocúpate de ellas.
No hace mucho escuché a alguien decir, lamento no recordar el dueño de la frase:
“Si te gusta sufrir, estás en el siglo adecuado”.
La decisión de sufrir o no, está en tus manos.