La delgada línea entre el plagio y la inspiración

Por Ikiru_yorokobu

Hace tiempo, cuando salió el videoclip de Rihanna de S&M, el fotógrafo David LaChapelle acusó a la cantante de plagio por la estética que había usado, similar a una serie de fotografías que había realizado.

Ahora, un tribunal federal ha fallado en favor del fotógrafo, lo que supone que puede ir a juicio contra la cantante. Él dice que Rihanna pidió a varios directores crear un vídeo tipo LaChapelle para la canción en cuestión y proporcionó un story board que incluía fotografías.

Os dejamos unas imágenes de muestra:
El tribunal señaló que las partes de Pink Room Scene y Striped Face de LaChapelle retrata a mujeres dominantes sobre hombres en una escena doméstica. Ese tema no puede ser protegido, porque según dijo el tribunal, los temas se desprenden naturalmente de la idea elegida de sadomasoquismo.
Sin embargo, la forma particular que el video de Rihanna retrató las escenas y la iluminación es sustancialmente similar a las imágenes de LaChapelle, aunque todos los detalles no eran idénticos.
También añadieron que ambas obras comparten el estado de ánimo frenético y surrealista de las mujeres dominantes en un espacio hipersaturado y claustrofóbico.
¿Hasta qué punto es inspiración? ¿Cómo se sabe cuándo se cruza esa línea y la del plagio? Hoy en día con la fotografía tan extendida no es raro ver tutoriales de cómo hacer efectos con nombre y apellidos, que si bien es cierto que nunca se consigue al 100% el efecto, nos da una aproximación.

Cuántos de nosotros no hemos visto fotos de gente que nos recuerdan a fotógrafos concretos. Siempre se suele decir que es el del estilo, pero no que es un plagio de la forma de trabajar o del procesado final. Al fin y al cabo, hay una delgada línea que separa ambos conceptos, y es complicado ponerse de acuerdo, por lo que para experimentar y encontrar nuestro propio camino no está mal, pero cuando lo que quieres es algo deliberado, al menos habría que tener la decencia de contactar con la musa