El entrenamiento básico para las ligas profesionales es una de las medidas contempladas en la preparación de la desescalada que comenzará el 4 de mayo y que, según ha detallado el jefe del Ejecutivo, durará entre seis y ocho semanas, por lo que de no producirse recaídas, España podría estar asentada en lo que el Gobierno denomina como una “nueva normalidad” a finales de junio.
El calendario del Gobierno despeja claramente los planes de La Liga de terminar la competición en Primera y Segunda División, que quedaron paralizadas por el estallido de la pandemia en la vigesimoctava y la trigésimo primera jornada, respectivamente.
En la Fase 0, que entrará en vigor el próximo lunes, se permitirá los entrenamientos individuales de profesionales y federados, además de entrenamientos “básicos” de ligas profesionales y actividad deportiva sin contacto.
En la Fase 1 se permitirá la apertura de centros de alto rendimiento con medidas de higiene y protección reforzadas, y si es posible, turnos. Se tratará de un entrenamiento “medio” en ligas profesionales.
En la Fase 2 estarán permitidos los entrenamientos “básicos” en ligas no profesionales fedaradas y entrenamiento total en ligas profesionales. Además se reabrirán los campeonatos profesionales mediante partidos a puerta cerrada o con limitación de aforo.
Por último, en la Fase 3 se permitirán los entrenamientos “medios” en ligas no profesionales federadas.
Por ello, los entrenamientos grupales volverán en el fútbol siempre y cuando los equipos formen parte de una zona determinada que se encuentre en esa Fase 2.
Si todas las provincias avanzaran de fase al mismo ritmo, la competición podría regresar a partir del próximo 2 de junio, siempre a puerta cerrada.