La diferencia entre hacer trading e invertir

Por Trading Financiero @TradingFinan

Cuando alguien empieza en el mundo de las inversiones, hay ciertos conceptos que se pueden liar en medio del curso de enseñanza. No en los instrumentos pero sí quizás en algunas ideas que se hacen sobre la forma de negociarlos.

De esa forma, hay una clasificación fundamental que puede hacerse dentro del mundo de las finanzas personales: inversores de largo plazo e inversores de corto plazo. Los primeros se basan de hacer análisis fundamentales completos con una trayectoria temporal amplia, en busca de lograr un buen rendimiento para el futuro.

En el caso de aquellos que hacen trading, si bien es una estrategia válida, no es un concepto que se parezca a lo que es una inversión cuando miramos a años vista. En este caso, los análisis de corto plazo para el trading se hacen más en función de una perspectiva técnica, analizando movimientos del pasado del activo y viendo tendencias en sus curvas de rendimiento.

Si bien al trading no le faltan fundamentos, el objetivo de invertir es ir haciendo poco a poco una riqueza personal en un período de tiempo largo a través de la compra y mantenimiento de una canasta de activos. Algunos economistas pueden incrementar sus rendimientos a través del rendimiento compuesto, invirtiendo los intereses de un activo a la misma tasa para potenciar las ganancias. Las inversiones son mantenidas generalmente por mucho tiempo, con un plazo que puede alcanzar décadas hasta que uno decida finalmente a desprenderse de un activo en particular. Cuando uno se posiciona en acciones, puede dejar pasar el tiempo y en el medio obtendrá utilidades por apreciación de capital, dividendos, splits de acciones y más.

Pero para tener las cosas más claras mis queridos lectores invertir significa también analizar ratios fundamentales de una empresa, como pueden ser el precio/ganancias, el retorno sobre el patrimonio neto, sobre activos, ratios de deuda, entre otros.
A diferencia de un inversor de largo plazo, que mira estas cuestiones, un trader observa principalmente tendencias y movimientos en la curva, como dijimos, a través del análisis técnico.

En cierta manera el trader se asemeja más a la figura no tan querida en el mercado del especulador. Aquellos que buscan sacar ganancia de algún movimiento brusco a corto plazo del mercado o apostando a la baja de algún activo en el corto plazo. Es por eso que muchos traders son seguidores de la venta en corto, alquiler, un activo pensando en la baja y venderlo caro para volver a comprarlo en un futuro a precio de liquidación.

En resumidas cuentas el inversionista y el trader tienen una diferente mentalidad y su forma de ganar es diferente. Mientras que el inversionista tiene la mentalidad de adquirir activos de alto valor a un buen precio y mantenerlos por 10 o más años, el trader desea aprovecharse de las fluctuaciones que presentan los precios de los mercados al corto o mediano plazo.

La diferencia entre los traders y los inversores es que nosotros operamos niveles, no narrativa, y eso lo debemos recordar de continuo.

Eso sí tanto para invertir con cabeza como para tradear exitosamente se necesita horas de práctica que pocas personas están dispuestas a aportar; sin embargo aquellas que se deciden a "hacer los deberes" obtienen una gran recompensa con esto.