La disciplina de Ibekwe

Publicado el 06 diciembre 2014 por Toni_delgado @ToniDelgadoG
Omnipresente en su vuelta a las pistas tras sus molestas en la espalda, la pívot estadounidense conduce a Uni Girona hacia la Copa de la Reina de Torrejón de Ardoz ante Cadí La Seu (69-49) 

Ibekwe ante Bahí - Foto: FCBQ. 


Su dorsal, el 25, parece multiplicarse. A veces hace de 1, conduciendo con soltura el balón, y siempre rinde de 4 y de 5. Ifly Ibekwe (Carson, California, EE UU, 1989) es un tesoro para Uni Girona, al que imprimió su billete para la Copa de la Reina de Torrejón de Ardoz con 19 puntos y 12 rebotes (29 de valoración) ante Cadí la Seu (69-49). Nadie diría que la jugadora se había perdido el partido anterior ante Gran Canaria por sus dolores de espalda. Ibekwe, que hace dos semanas alcanzó los 56 tantos de valoración en Logroño, sobresalió de principio a fin en Fontajau, y a los 6m 39s ya llevaba 10 puntos (15-8). Mención aparte merece su duelo con Laura Gil, que junto con Suárez y Tania Pérez reactivaron a unos visitantes que aguantaron el tipo hasta el tramo final de la primera parte. Fue entonces cuando Brittany Chambers aceleró para finiquitar el partido. Tras el descanso, y poco a poco, se fue encontrando mejor Vanessa Gidden, otra que reaparecía en las locales, aunque tras estar un mes fuera de las pistas por molestias físicas: anotó siete puntos y capturó nueve rebotes en 11 minutos. 

No tuvo Gidden la convicción de Ibekwe, que ante la baja de ésta cogió más responsabilidad en el equipo. Ha conectado con el grupo y con el entrenador, Ramon Jordana, que quiso cambiarle cuando cometió la cuarta personal tras un encontronazo con Laura Gil. Ibekwe no se cansa de repetir que este Uni Girona puede ganar títulos (en Torrejón de Ardoz tendrá como rivales a Rivas Ecópolis, clasificado como organizador de la Copa, y CB Conquero;  Perfumerías Avenida podría concretar su pase esta tarde). Palabras que el grupo demuestra en la pista minimizando sus errores. Chambers, por ejemplo, perdió hasta siete pelotas (cinco en el primer cuarto), pero capturó 10 rebotes y anotó 14 puntos. Las locales extraviaron 20 pelotas, pero cogieron 15 rebotes más que un Cadí La Seu incansable y penalizado por haber empezado con dos derrotas. El juego del conjunto de Miguel Ángel Ortega se explica a través del discurso del entrenador. "Podíamos haber recuperado cinco balones más", les dijo a sus jugadoras tras el primer cuarto, cuando se hicieron con siete pelotas. "Tenemos que fijarnos en lo que está pasando en la pista. Eh, queda partido todavía", añadió Ortega, con 58-37 en el marcador y seis minutos por disputarse. Cuando Gidden se sentía más Gidden y Anna Carbó y Noemí Jordana no dejaban de hacer un trabajo silencioso. A Ibekwe todabía le quedaba redondear sus números. De hecho, acabó el partido con las jóvenes López, Comella, Ros y Jodar, para las que es un ejemplo de compromiso, disciplina y profesional. El incidente en BurgosLejos, muy lejos, queda su polémica entrada en la Liga Femenina. El 1 de febrero de 2012 se anunció su llegada a Burgos, donde tuvo un notable rendimientos con 61 puntos y 26 rebotes, repartidos en seis partidos. El último, curiosamente, una victoria ante Uni Girona.  Ibekwe quiso entrenarse pese a tener la rodilla inflamada. Según la versión del club, a Ricardo González, su entonces técnico, no le gustó falta de actitud  y de concentración, y la castigó a hacer 50 abdominales. Molesta, Ibekwe, se habría negado a hacerlas, pese a la insistencia del entrenador y del vicepresidente, Javier Ruiz. Así que la mandaron al vestuario. Ibekwe se perdería los dos siguientes partidos, antes de rescindir, de mutuo acuerdo, su contrato con el conjunto burgalés. Ahora, como le contaba a Jordi Prat en una espléndida entrevista para L'Esportiu, Ibekwe es otra: "Es la primera vez que ficho por un equipo para todo el año, y eso siempre te da una tranquilidad muy beneficiosa". Y nadie duda de su disciplina.