En los años 30, tras muchos años de práctica en la medicina convencional y homeopática, el Doctor Edward Bach descubrió un método simple y natural de sanar a través de la utilización de flores silvestres, las cuales se enfocan más en la sanación de los desórdenes de personalidad del paciente que en la condición física individual.
Lo que genera los problemas físicos de las personas, más que las enfermedades existentes, son las condiciones emocionales del individuo. Durante varios años Bach pudo reconocer y encontrar un remedio apropiado en cada caso y halló todos los remedios en flores de los campos y en árboles de los bosques, es decir, la energía mágica del poder sanador de la naturaleza.
A lo largo de la historia, el hombre ha hecho uso de la medicina herbaria y hasta hace algunos años, todos los productos farmacéuticos se preparaban a partir de sustancias naturales. Los remedios de Bach, sin embargo, no utilizan la materia física de la planta sino la energía esencial que se encuentra contenida en la flor. Esta energía sanadora se extrae mediante un proceso particular y se almacena en un liquido que la conserva.
La delicada sustancia resultante se utiliza para tratar la causa de la enfermedad a un nivel sutil. Así pues, mientras la mayoría de las medicinas tratan los males del cuerpo con materiales físicos, los remedios de Bach tratan aquello que no puede verse (la causa psicológica) que esta detrás de toda enfermedad.
Las flores de Bach tatan al paciente y no a la enfermedad. Sea lo que sea aquello que el paciente está sufriendo en el cuerpo físico como enfermedad, la causa primera de ese estado puede ser erradicada si somos capaces de determinar y de contrarrestar el desequilibrio que se encuentra en la psique del paciente.
Los remedios de Bach pueden aplicarse muy bien en casi todas las circunstancias. Aparte de ser esta, una forma de medicina, sin ningún efecto secundario, que funciona muy bien en niños, animales, incluso en plantas, y son absolutamente compatibles con cualquier tratamiento o terapia, tanto alternativa como alopática. Las Flores de Bach pueden utilizarse también en el desarrollo personal, ya que nos ayudan a profundizar en nuestro interior a armonizarnos y a equilibrarnos.
Enfermedades físicas y psicosomáticas
La enfermedad física es el resultado de un desequilibrio emocional que persiste a través del tiempo, debilitando el organismo y el sistema inmunitario, así como la capacidad de defenderse ante agentes patógenos. Esto es debido a que respuestas como la ansiedad o el estrés, por ejemplo, van acompañadas de respuestas fisiológicas que a la larga pueden dar lugar a síntomas físicos o alteraciones que conforman las bases de todo tipo de enfermedades.
Por este motivo, para aplicar los remedios florales en el tratamiento de una determinada enfermedad, es necesario basarse en los estados emocionales negativos que está sintiendo el paciente (miedo, irritabilidad, depresión, ansiedad, apatía, agresividad, odio, etc.) para seleccionar el medicamento más apropiado ya que cada flor sirve para tratar un estado emocional negativo diferente.
Trastornos psicológicos
Dado que las flores de Bach actúan directamente sobre los estados emocionales negativos, pueden utilizarse en el tratamiento de problemas de este tipo (ansiedad, depresión , obsesiones, insomnio, traumas, etc). Las flores actúan a nivel inconsciente, empujando al organismo hacia la autocuración y el equilibrio emocional. Por eso muchas personas sueñan más al tomar las esencias florales, debido a que su subconsciente está trabajando en la resolución de conflictos.
Los resultados de la terapia
Los remedios florales no presentan efectos secundarios ni toxicidad. A veces, las personas tratadas con este sistema sueñan más y puede que necesiten dormir un poco más, debido a que su subconsciente está haciendo un esfuerzo especial de autocuración. Este efecto suele aparecer a los pocos días de empezar el tratamiento (aunque no siempre).
Los resultados serán diferentes dependiendo de cada persona y del tiempo que ha pasado desde que aparecieron sus problemas. A veces se trata de un trastorno agudo, de unas pocas semanas de duración, y que es consecuencia de un acontecimiento vital determinado, como problemas económicos, cambios importantes que nos crean inseguridad, problemas que no sabemos cómo afrontar y nos deprimen, exceso de trabajo, etc. En otras ocasiones, es algo que venimos arrastrando de hace años. En el primer caso, el tratamiento será más corto, mientras que en el segundo puede durar varios meses.
Para determinar la flor y dosis personal, lo ideal es acudir a un terapeuta ya que elegir la flor adecuada supone estar en condiciones de actuar sobre uno mismo y sobre los demás para ayudarles a crecer espiritualmente. Significa asumir que, de este modo, se empieza a tomar conciencia de la propia vida para actuar y aprende a reconocer cuáles son los propios desequilibrios. Significa, por último permitir que las flores se relacionen con nosotros, equilibrándonos y a la vez sugiriéndonos una nueva forma de afrontar la vida cotidiana y las relaciones con quienes nos rodean.
Para lograrlo, debemos primero ser capaces de trabajar con constancia sobre nosotros mismos, para aprender a reconocer nuestros estados de ánimo, incluso el más profundo, y por consiguiente activar el proceso de curación.
Un proceso que, en apariencia, debemos emprender solos, pero que, realmente, nos permite sentirnos parte del mundo, iguales a todas las demás criaturas y, sobre todo, conscientes del hecho de que nuestros errores son parecidos a los de tantos otros y que a través del reconocimiento de los propios desequilibrios, se accede ala comprensión universal. De este modo, un acto de amor hacia nosotros mismos se transforma en un acto de amor y de comprensión respecto a los demás. Hay que acabar, en suma, con el hábito de comparar y confrontar todo con nosotros mismos y adoptar una nueva actitud. Debemos afrontar los retos que nos depara el destino con decisión, conscientes de que hemos de llevar a cabo una misión concreta en esta vida. De hecho, esos obstáculos nos permiten adquirir un reconocimiento más profundo sobre la realidad.
Una premisa de este tipo nos lleva a considerar que la elección de la flor adecuada esta estrechamente relacionada con nuestra habilidad para actuar como mediadores entre las propiedades de la flor y nuestra propia capacidad de comprensión, que debe carecer de proyecciones, prejuicios o recelos y que, a su vez, debe estar dirigida por un cierto reconocimiento tanto de las flores como de las distintas sintomatologías.
Los 38 remedios florales de Bach
Existen 38 remedios comprendidas en el sistema floral del Dr. Bach. Estos 38 remedios están compuestos por 34 flores silvestres y 3 flores de cultivo. El último no es una flor, sino agua de manantial (Rock Water).
Aquí se mencionan las 38 Flores usadas en los remedios y sus aplicaciones particulares:
1 Agrimony: Agrimonia Se aplica cuando el paciente oculta emociones tortuosas, problemas graves y angustia inconsciente tras una máscara de alegría y despreocupación permanente. Evita discusiones y busca armonía. Tendencia a las adicciones, tabaco, drogas, alcohol, juego, trabajo, asumir riesgos, comida y compras, como mecanismo de escape a su tormento mental. Busca ser aceptado. Si se enferma bromea al respecto.
2 Aspen: Álamo temblón Si se presenta miedo a lo sobrenatural, a situaciones imprecisas que siente que lo amenazan, y a la muerte. Presagios. Temor vago e inexplicable. Agorafobia, claustrofobia.
3 Beech: Haya Cuando el paciente tiende a ser intolerante y a criticar despiadadamente. Juzga sin sensibilidad ni comprensión. Arrincona. No soporta las ideas y costumbres diferentes a las suyas. Es arrogante.
4 Centaury: Centáurea No puede decir no. Reacciona exageradamente a los deseos de los demás, buscando complacerlos. Sacrifica sus propias necesidades para quedar bien. Su predisposición a servir es explotada. Se presta al dominio y el abuso de otros. Su voluntad es débil.
5 Cerato: Ceratostigma Busca la aprobación y el consejo de los demás, pues no confía en su juicio, intuición, ni en sus decisiones y opiniones. Sus convicciones no son firmes. Cambia fácilmente de opinión. Es indeciso.
6 Cherry plum: Cerasífera Miedo a perder el control de sus actos, a cometer acciones terribles y a enloquecer. Pensamientos irracionales persistentes. Arrebatos incontrolables.
7 Chestnut bud: Brote de castaño Repite sus errores, porque no reflexiona sobre ellos ni aprende de sus experiencias. Reincide. No escarmienta.
8 Chicory: Achicoria Sobreprotege a sus seres queridos y los domina mediante una manipulación excesiva. Considera saber más que sus dependientes. Tiene una personalidad posesiva y egoísta. Se inmiscuye en los asuntos de los demás continuamente. Espera la devoción de los que sobreprotege y cuando no la obtiene se siente víctima. Después los persigue, criticando.
9 Clematis: Clemátide Soñador que evade la realidad. Su pensamiento. Difícilmente está en el aquí y el ahora. Distraído, presta poca atención a lo que sucede a su alrededor. Vive en un mundo de fantasía, como un mecanismo de escape a su infelicidad.
10 Crab apple: Manzano silvestre Flor de la limpieza para quién tiene la sensación de estar sucio y ser impuro, baja autoestima y terror a contaminarse.
11 Elm: Olmo Abrumado por sus responsabilidades. Piensa que no es capaz de cumplirlas.
12 Gentian: Genciana de campo Pesimismo. Depresión por causas conocidas. Escepticismo. Control débil ante la frustración.
13 Gorse: Aulaga Desesperado. Sin ninguna esperanza. Siente que ya no tiene caso nada.
14 Heather: Brezo Ensimismado. Centrado en sí mismo. Necesita público que lo escuche. Habla excesivamente, pero no escucha.
15 Holly: Acebo Celos, desconfianza, envidia, odio y rencor. Carece de compasión. Para quienes necesitan amor.
16 Honeysuckle: Madreselva No vive el presente. Nostalgia. Añoranza del pasado y los buenos tiempos.
17 Hornbeam: Hojarazo o Carpe Agotamiento mental por hastío.
18 Impatiens: Impaciencia Soledad de quien no puede estar acompañado porque marcha de prisa. Impaciencia. Irritabilidad.
19 Larch: Alerce Sentimiento de inferioridad. Espera fracasar.
20 Mimulus: Mímulo Miedo a lo conocido. A situaciones concretas, definibles. Timidez.
21 Mustard: Mostaza Depresión y tristezas de causas desconocidas, que aparecen y desaparecen sin motivo.
22 Oak: Roble Luchar desesperadamente contra la corriente y sin descanso. Dedicación obsesiva al trabajo.
23 Olive: Olivo Agotamiento total, físico y/o mental.
24 Pine: Pino Desesperación por sentimiento de culpa y autorreproche.
25 Red chestnut: Castaño rojo Miedo a que les suceda algún daño a los seres queridos. Preocupación por ellos.
26 Rock rose: Heliantemo o Jarilla Pánico y terror paralizante. Estados de angustia agudos. Pesadillas.
27 Rock water: Agua de roca Perfeccionismo. Severidad. Rigidez consigo mismo.
28 Scleranthus: Scleranthus Indecisión entre dos extremos opuestos.
29 Star of Bethlehem: Leche de gallina Secuelas de traumatismos físicos y mentales.
30 Sweet chestnut: Castaño dulce Desesperación profunda. Sienten que han llegado al límite del sufrimiento.
31 Vervain: Verbena Fanatismo. No comparte la carga. Fortaleza.
32 Vine: Vid Avidez por el poder. Dominador. “Pequeño tirano”.
33 Walnut: Nogal Indecisión para iniciar etapas nuevas o manejar situaciones difíciles.
34 Water violet: Violeta de agua Soledad de los orgullosos. Distanciamiento por sentimiento de superioridad.
35 White chestnut: Castaño de Indias Rumiación torturante de ideas. Diálogos internos
36 Wild oat: Avena silvestre Falta de metas. Descontento e incertidumbre por desconocer la misión en la vida.
37 Wild Rose: Rosa silvestre o Escaramujo Desinterés, apatía, resignación, capitulación. Falta de motivación.
38 Willow: Sauce Se siente víctima del destino. Resentimientos.
Los 7 grupos de Flores de Bach
Remedios para los que sienten temor
Rock Rose: Para quienes se alarman con facilidad o sienten pánico repentino. En accidentes, shock o terror.
Mimulus: Para personas tímidas y para aquellos que sienten miedo de las cosas conocidas. Temores y ansiedad.
Cherry Plum: Para miedo a perder el control, padecimiento de pensamientos irracionales. Contradicción psicológica
Aspen: Para los que sienten miedo sin motivo conocido.
Red Chestnut: Para el obsesionado por el cuidado de los demás. Imagina lo peor para sus familiares y amigos más cercanos, pero descuida de sí mismo.
Remedios para los que sienten incertidumbre
Cerato: Para los que no confían en sí mismos. Sugestionables, no escuchan su voz interior. Siempre buscan aprobación en los demás.
Scleranthus: Para los que son incapaces de tomar una decisión. Alteraciones de humor y de pensamiento.
Gentian: Para los que se desalientan con facilidad delante de situaciones imprevistas. Dificultad en superar todo que no sea lo cotidiano.
Gorse: Para el pesimista. Para el que siempre se siente vencido o carente de fe.
Hornbeam: Para el que no tiene voluntad de hacer las cosas y demora sus responsabilidades. Para aquellos que tienen una incapacidad física limitante o sufren bloqueos afectivos
Wild Oat: Para determinar el sentido que uno debe adoptar en su vida. Para el que no sabe que carrera o que camino seguir, o que trae una sensación de pérdida de tiempo y desaliento.
Remedios para los que tienen falta de interés en general
Clematis: Para quien no presta atención, para el soñador, el distraído. Evasión mental. Indicado para personas de poca vitalidad y sin interés por la vida.
Honeysuckle: Para el nostálgico. Para quien vive siempre en el pasado. Son personas que no creen en recuperar la felicidad perdida.
Wild Rose: Para el apático. Para el que se resigna fácilmente. No tienen energía para luchar y cambiar el rumbo de los acontecimientos.
Olive: Para el fatigado. Para el que carece de energía. La vida parece un pesado fardo. Indicado para períodos de convalecencia o para TPM (tensión pre-mestrual)
White Chestnut: Siempre las mismas preocupaciones e inquietudes sin poder alejarlas. Pensamientos obsesivos.
Mustard: Para el que se siente triste y deprimido sin que exista motivo alguno.
Chestnut Bud: Para aquellos que no aprenden de la experiencia. Para quienes repiten siempre los mismos errores.
Remedios para la Soledad
Water Violet: Para el orgulloso, reservado. Para quien disfruta estar solo. Muchas veces siéntense superiores y distantes de los otros, el que produce tensión física.
Impatiens: Para el impaciente e irritable. Son personas inteligentes y rápidas en pensamiento y acción. Pierden la paciencia con personas de ritmos lentos.
Heather: Siempre obsesionados por sus propios temas. Locuaz y poco escucha. Necesitan de compañía constantemente. Les gusta acercarse a su interlocutor.
Remedios para excesiva sensibilidad a influencias externas
Agrimony: Para aquellos que ocultan preocupaciones detrás de un rostro que denota alegría. No les gusta el enfrentamiento y discusiones
Centaury: Para los que sirven a los demás excesivamente. Sufren imposiciones externas. Son dedicadas y dominadas.
Walnut: Indicado para una gran transición (casamiento, mudanza de empleo o país, divorcio, cambios).
Holly: Para el que siente envidia, odio y celos. Para el que sospecha de todos. El remedio desenvuelve sentimientos positivos de bondad y armonía.
Remedios para el desaliento o la desesperación
Larch: Para el temor a equivocarse, complejo de inferioridad. Para falta de auto confianza.
Pine: Para el complejo de culpa. Personas que se culpan hasta de los errores de los demás.
Elm: Para el que está abrumado por las responsabilidades.
Sweet Chestnut: Para el que se siente muy angustiado y piensa que ha llegado al límite. Para desesperación y sufrimiento.
Star of Bethlehem: Para efectos de shock, tras una noticia grave, accidente o perdidas. Para aceptar consuelo.
Willow: Para los que sienten resentimiento y amargura. Los que sienten lástima de sí. Inconformados delante del fracaso.
Oak: Para los que son fuertes delante de la adversidad. Acreditan en su esfuerzo para superar la situación. Agotamiento físico.
Crab Apple: Es un remedio purificador; actúa como depurativo de cuerpo y mente. Elimina toxinas, gordura, ácido úrico, cálculos, etc
Remedios para excesiva culpa y preocupación por los demás
Chicory: Sobre protector, en especial de los que ama.
Vervain: Para excesivo entusiasmo. Su constante estado de alerta no permite relajar.
Vine: Para el dominante, el inflexible.
Beech: Para el que es intolerante con los demás y critica continuamente.
Rock Water: Para quienes son muy estrictos. Para quienes se niegan a sí mismos muchas de las alegrías de la vida. Son duros y buscan la perfección extrema