Jelou a todos! Luego de seis meses sin dar señales en este blog, he decidido retomarlo. Como saben, en mi último post les conté que me fui de Indonesia para emprender nuevos caminos y que recorrerlos me tomaría mucho tiempo y concentración lo cual no me permitiría mantenerme al frente de la computadora para escribir y dicho y hecho eso fue lo que pasó.
En Caracas, me reencontré con mis amigos, mi familia, mi perrita, mi casa, la comida, el Ávila. Los primeros días fueron increíbles, salidas, contar historias, mostrar fotos y videos, preparar recetas indonesias, caminar, montarme en el metro y bueno para qué contar más.
Después de todo el frenesí que acarrea volver a nuestra tierra, comencé a vivir de nuevo Caracas, la ciudad que me encanta y que me desencanta, la de las historias lindas y negras, la que me pide que me quede y me dice que me vaya. Y ya yo me iba, había hecho planes fuera de mi país otra vez. Luisfer me estaba esperando en Miami, así como yo lo esperé en Indonesia, todo era cuestión de esperar que salieran mis papeles para embarcarme en este nuevo destino, sin saber con lo que me iba encontrar. Yo nunca había estado en Estados Unidos, a decir verdad, nunca me había llamado la atención esta parte del mapa, venirme a vivir para acá nunca estuvo en mis planes, pero como ven, nadie sabe lo que le espera. La cuestión es que así comienza este nuevo capítulo de mi blog (que ahora tiene nueva imagen), trataré de contar bastante y ya que tengo bastante tiempo libre, escribiré para que no me pierdan la pista.
Les dejo algunas fotos de mis amigos y mi adorada familia en Caracas, los que extraño muchísimo y que me hacen reír.